La inflación anual en el Reino Unido se elevó al 10,9% en septiembre

La inflación británica volvió a pegar ayer otro respingo y se encaramó hasta el 10,9% interanual, cifra sólo superada en la Europa comunitaria por Grecia y Portugal. La noticia era esperada y los conservadores reunidos en el congreso de Bournemouth respiraron aliviados porque no se atravesó la barrera del 11%. La clase política, la City y los ciudadanos confían en que la nueva cota marque el punto de inflexión en la evolución de los precios.

La subida de 0,3% puntos con respecto a agosto fue achacada a la carestía de los crudos, al fin de la rebajas veraniegas y a los más altos pre...

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La inflación británica volvió a pegar ayer otro respingo y se encaramó hasta el 10,9% interanual, cifra sólo superada en la Europa comunitaria por Grecia y Portugal. La noticia era esperada y los conservadores reunidos en el congreso de Bournemouth respiraron aliviados porque no se atravesó la barrera del 11%. La clase política, la City y los ciudadanos confían en que la nueva cota marque el punto de inflexión en la evolución de los precios.

La subida de 0,3% puntos con respecto a agosto fue achacada a la carestía de los crudos, al fin de la rebajas veraniegas y a los más altos precios telefónicos. Si el dato de septiembre ha sido una mala noticia para el Gobierno, fue acogida con satisfacción por jubilados, pensionistas y parados que a partir del próximo mes de abril verán incrementarse sus subsidios en un 10,9%.

John Major, ministro de Hacienda, que el día anterior se referió a la Inflación como "el veneno de la economía" repitió ayer su cantinela de las últimas semanas de que la inflación va a bajar a partir de ahora y que el año próximo lo hará con celeridad, objetivo que espera lograr con el concurso de los otros socios comuntarios, ahora comprometidos en su estrategia antlinflacinaria gracias a la entrada de la libra en el SME.

La cifra de ayer, la peor desde febrero de 1982, deja al Reino Unido muy lejos de sus principales competidores comunitarios -Alemania tiene el 2,8%, Francia el 3,5% e Italia el 6,3%-, aunque fue acogida con calma por los mercados financieros. Un analista señaló que la cifra estaba un poco por encima de lo esperado y la calificó de "ligeramente decepcionante", pero ni la Bolsa ni la cotización de la libra se vieron sensiblemente afectadas por el 10,9%, convencidas de que marca el fin de una época, salvo imponderables del Golfo.

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