Rosa Posada se perfila como candidata del CDS a la presidencia de la Comunidad
La presidenta de la Asamblea de Madrid, Rosa Posada, se perfila como firme candidata para encabezar la lista del Centro Democrático y Social (CDS) en las próximas elecciones autonómicas. Fuentes de ese partido confirmaron ayer que el presidente del CDS, Adolfo Suárez, ya comunicó hace tres meses a Posada su intención de proponerla para la candidatura a la presidencia de Gobierno madrileño.Posada afirmó ayer que mantiene "la ilusión" de seguir trabajando en la autonomía madrileña, aunque advirtió que el Comité Nacional del CDS, del que forma parte, no adoptará una decisión definitiva sobre cand...
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La presidenta de la Asamblea de Madrid, Rosa Posada, se perfila como firme candidata para encabezar la lista del Centro Democrático y Social (CDS) en las próximas elecciones autonómicas. Fuentes de ese partido confirmaron ayer que el presidente del CDS, Adolfo Suárez, ya comunicó hace tres meses a Posada su intención de proponerla para la candidatura a la presidencia de Gobierno madrileño.Posada afirmó ayer que mantiene "la ilusión" de seguir trabajando en la autonomía madrileña, aunque advirtió que el Comité Nacional del CDS, del que forma parte, no adoptará una decisión definitiva sobre candidaturas electorales hasta septiembre. "La confirmación de Agustín Rodríguez Sahagún como número 1 en el Ayuntamiento de Madrid se ha adoptado por razones evidentes", precisó.
Sectores críticos del CDS han subrayado que, bajo la dirección del actual responsable regional del partido, Gerardo Harguindey, se han reducido notablemente las expectativas del partido en la comunidad autónoma, que quedan por debajo del 5% de intención de voto, y se ha consumado la salida de cuatro diputados regionales y numerosos concejales. Al mismo tiempo, un centenar de militantes opuestos a la línea seguida por la federación madrileña del CDS han sido suspendidos de militancia.
Por su parte, Posada se ha mantenido al margen de las disputas internas del partido, escudada en su puesto institucional, y al mismo tiempo cuenta con buenas relaciones con los disidentes, por lo que es valorada como una figura capaz de remontar la caída electoral del CDS en Madrid y reagrupar a sus militantes.