Entrevista:LUZ DE GAS

"La mía es unas novela sobre la patria"

Leyendo Las edades de Lulú, Almudena se me antojó algo Lulú; y la dibujaba como a una mujer con cara de virgen amarilla, cuerpo de cebo de pesca de bajura, ¿con sexo? Su libro, traducido en nueve países, es literatura fraguada con sexo. Después la vi y le dije lo que dicen: "Es libro para masturbarse", "es proustiana, "es potencia del verbo...". Ella: "Acepto todas las lecturas". Y hablamos mucho, y al final, riendo, como niña revoltosa, susurraba: "Me gustan los hoteles y los aeropuertos; y los cementerios, porque son tranquilos y bonitos, son como jardines de muertos". Almudena...

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Leyendo Las edades de Lulú, Almudena se me antojó algo Lulú; y la dibujaba como a una mujer con cara de virgen amarilla, cuerpo de cebo de pesca de bajura, ¿con sexo? Su libro, traducido en nueve países, es literatura fraguada con sexo. Después la vi y le dije lo que dicen: "Es libro para masturbarse", "es proustiana, "es potencia del verbo...". Ella: "Acepto todas las lecturas". Y hablamos mucho, y al final, riendo, como niña revoltosa, susurraba: "Me gustan los hoteles y los aeropuertos; y los cementerios, porque son tranquilos y bonitos, son como jardines de muertos". Almudena, enigma.Pregunta. ¿Marta Sánchez jaleando sus pechos por doquier?

Respuesta. Es chabacano.

P. ¿Saben los hombres de las mujeres?

R. Poco, lo que ven.

P. La palabra ligar, ¿le gusta?

R. Sí; seducir es otra cosa.

P. ¿Si la aborda alguien?

R. No hago caso en general.

P. ¿Cuándo hizo caso?

R. Dos veces, y acerté.

P. ¿El Quijote es erótico?

R. Es todo, el Quijote.

P. ¿Dónde sitúa la Biblia?

R. Es más erótica que el Quijote incluso.

P. ¿Le costó la frase de su libro: "escuché el inequívoco sonido de la cremallera"?

R. No, es la vida misma.

P. La cama, ¿es digna de la inteligencia del sexo?

R. Sí, quizá sea el escenario más digno.

P. ¿Lulú trasciende la biografia de Almudena?

R. Sí, porque no tuve un hombre como el de Lulú.

P. ¿Qué hacía a los 15 años?

R. Todo lo que podía y me dejaban, de casi todo.

P. Hoy, ¿Lulú es moneda corriente?

R. Es moneda de cinco duros, no de una peseta.

P. ¿Visita escaparates de ropa interior?

R. Me gusta mirarlos.

P. ¿Recomienda su libro?

R. A las mujeres aburridas

P. Jomeini la hubiese lapidado, san Pedro la enviará al infierno, y el Gobierno la ha subvencionado el filme de Lulú con 40 millones...

R. Luego san Pedro no me enviará al infierno.

P. ¿Ha regalado o le han robado sujetadores, bragas?

R. No, camisetas.

P. ¿Recibe proposiciones?

R. No, les doy más miedo aún a los hombres.

P. ¿Anda faltosa?

R. No, siempre hay toreros.

P. ¿Necesita escribir para vivir sexualmente?

R. No, escribo para vivir.

P. ¿Qué hombre le enseñó más?

R. Mi marido me enseñó a beber vino.

P. Ángela Molina y otras se han negado a ser Lulú en cine: ¿es inteligente eso?

R. No estoy en su pellejo.

P. Usted también se negó.

R. Sí, porque escribí el libro, el guión y aún soy muy joven para ser Orson Welles.

P. La subvención de 40 millones, ¿la merecería mejor un filme sobre la patria?

R. La mía es una novela sobre la patria.

P. ¿Aspira al Nobel o al dinero?

R. Preferiría el dinero.

P. ¿Se insinúa a las personas?

R. Me insinúo a los hombres que me gustan.

P. ¿La insultó alguien?

R. Sólo algunos periódicos.

P. Lulú es una historia, ¿de qué amor?

R. De un amor absoluto.

P. ¿Por qué son comunistas los hombres de Lulú?

R. Porque mis primeros novios eran todos comunistas.

P. ¿El sexo en televisión?

R. Destruye la magia.

P. ¿La sexualidad verbal?

R. Es lo que más me seduce, antes y después. Que me digan "te mato..."

P. "Poli, vallecano, machaca al italiano", se pedía el jueves último en Madrid.

R. Eso es más amor que pornografia.

P. ¿Un lance chusco tras el libro?

R. Nada, le repito que les doy miedo a los tíos, en serio.

P. ¿Y a las tías?

R. Se me dan mal, quizá porque los tíos se me dan bien.

P. Como instrumento literario, ¿se le acabó el sexo?

R. No, el sexo es infinito.

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