GENTE

Robert Tappan Morris,

el estudiante norteamericano que creó y desarrolló un virus informático indestructible que paralizó miles de computadoras oficiales en 1988, ha sido sentenciado por un juez de Siracusa (Nueva York) al pago de una multa de alrededor de 11 millones de pesetas y al cumplimiento de 400 horas de servicios comunitarios, informa Albert Montagut. Morris, que deberá someterse a un periodo de tres años de libertad vigilada, no irá a la cárcel, porque, según el juez, "su delito no se puede enmendar enviándole a prisión". Esta era una de las sentencias más esperadas del año en Estados Unidos. Morri...

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el estudiante norteamericano que creó y desarrolló un virus informático indestructible que paralizó miles de computadoras oficiales en 1988, ha sido sentenciado por un juez de Siracusa (Nueva York) al pago de una multa de alrededor de 11 millones de pesetas y al cumplimiento de 400 horas de servicios comunitarios, informa Albert Montagut. Morris, que deberá someterse a un periodo de tres años de libertad vigilada, no irá a la cárcel, porque, según el juez, "su delito no se puede enmendar enviándole a prisión". Esta era una de las sentencias más esperadas del año en Estados Unidos. Morris, de 24 años de edad, sonrió cuando conoció la decisión judicial y confesó que temía ser enviado a prisión. Este estudiante de la Cornell University es el primer norteamericano sometido a juicio por haber violado la ley federal de 1986 que protege a los sistemas computadorizados de la acción de los denominados hackers, los piratas informáticos, un grupo marginal cada vez más numeroso y en el que Morris está considerado como un símbolo. Algunos de esos especialistas opinaban ayer que la sentencia ha sido muy tenue teniendo en cuenta el daño ocasionado por Morris.

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