El desplome de Tokio arrastró a Wall Street

Las fuertes oscilaciones registradas en la bolsa de Tokio produjeron pequeñas realizaciones de beneficio en Wall Street y en las bolsas europeas, ya que el conocido índice Nikkei se situó a mediodía con una pérdida superior a 2.000 puntos, lo cual alarmó a muchos analistas. Afortunadamente, las cotizaciones se recuperaron en parte, con lo que, al cierre, la pérdida quedó en 963 puntos equivalente al 3,15%. En general, se estima que un descenso ordenado de la bolsa de Tokio no tendrá efectos negativos sobre los de más mercados financieros, sin embargo, una, caída en picado podría tener graves r...

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Las fuertes oscilaciones registradas en la bolsa de Tokio produjeron pequeñas realizaciones de beneficio en Wall Street y en las bolsas europeas, ya que el conocido índice Nikkei se situó a mediodía con una pérdida superior a 2.000 puntos, lo cual alarmó a muchos analistas. Afortunadamente, las cotizaciones se recuperaron en parte, con lo que, al cierre, la pérdida quedó en 963 puntos equivalente al 3,15%. En general, se estima que un descenso ordenado de la bolsa de Tokio no tendrá efectos negativos sobre los de más mercados financieros, sin embargo, una, caída en picado podría tener graves repercusiones en las bolsas occidentales.En este contexto se detectaron ligeras tomas de beneficio en los principales merca dos europeos, sin destacar ninguna plaza en particular Por las mismas razones, la bolsa de Nueva York cerró con una pérdida de 32,21 puntos aún con un volumen de contratación superior al de días anteriores. Tras este recorte, el índice Dow Jones quedó por debajo de la barrera del 2.700, concretamente en el 2.695,72. Los analistas no se han visto sorprendidos por las realizaciones de beneficio, ya que se anticipaba que así ocurriría, dado el largo recorrido alcista de esta bolsa.

En los mercados de divisas, el dólar se mantuvo estable aunque se detectaba una ligera tendencia al alza, ya que el billete verde se ve beneficiado del rol de moneda refugio que ostenta en un entorno de tensiones entre Moscú y Lituania, y más recientemente entre Rumania y Hungría. Asimismo, las fuertes oscilaciones del mercado de Tokio beneficiaron al dólar.

En este contexto, su cotización alcanzó un máximo de 1,713 marcos y 155,3 yenes. No obstante, la incapacidad del dólar para continuar las alzas incitó a los inversores a realizar beneficios.

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