Acuerdo para reducir la plantilla en Imepiel
El comité de empresa de la fábrica de calzados Industrias Mediterráneas de la Piel (Imepiel), de Vall d'Uixó, y los nuevos propietarios, el grupo catalán Círculo de Financiación y Gestión, llegaron en la medianoche del viernes a un acuerdo sobre la reestructuración de la plantilla de la factoría, tras negociar durante más de 14 horas.El acuerdo alcanzado prevé un expediente de regulación de empleo que afecta a 620 de los 1.450 trabajadores que integran la actual plantilla de la fábrica. 324 serán recolocados en otras industrias que se creen en la comarca, en especial en la factoría que instala...
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El comité de empresa de la fábrica de calzados Industrias Mediterráneas de la Piel (Imepiel), de Vall d'Uixó, y los nuevos propietarios, el grupo catalán Círculo de Financiación y Gestión, llegaron en la medianoche del viernes a un acuerdo sobre la reestructuración de la plantilla de la factoría, tras negociar durante más de 14 horas.El acuerdo alcanzado prevé un expediente de regulación de empleo que afecta a 620 de los 1.450 trabajadores que integran la actual plantilla de la fábrica. 324 serán recolocados en otras industrias que se creen en la comarca, en especial en la factoría que instalará la firma holandesa Silenka en la cercana localidad de Xilxes. A otros 296 se les dará la jubilación anticipada a los 53 años y a los 91 restantes se les concederá bajas temporales de cuatro meses para después volver a ser contratados en el caso de que estuviesen en el paro.
Este acuerdo, firmado por todas las partes que estuvieron presentes en la negociación -el comité de empresa, directivos provinciales de UGT y CC OO, los nuevos propietarios y la delegación de Trabajo de la Generalitat-, será sometido a un referéndum entre los trabajadores, aunque esto tendrá que ser confirmado mañana en asamblea.
El expediente de regulación de empleo ha sido el principal escollo entre los nuevos propietarios y los trabajadores desde que el pasado día 3 de febrero el Consejo de Ministros autorizase la reprivatización de la fábrica. En principio, los nuevos propietarios pretendían que el expendiente afectase a 711 trabajadores, mientras que el comité tan solo estaba dispuesto a que fuesen 300. Este diferencia provocó incidentes durante las primeras negociaciones, celebradas en la fábrica, como los ocurridos el 23 de febrero, cuando hubo un intento de agresión de los trabajadores a los nuevos propietarios.