Tribuna:

Estanciamiento total

La inactividad empieza a perfilarse como la única forma de supervivencia para los mercados de valores, puesto que se ha llegado a un punto en el que lo más deseable es el estancamiento, por cuanto supone de freno a los recortes. El goteo a la baja parece ser la orientación más lógica de las cotizaciones, dadas las circunstancias, y esa postura fue la que se adoptó a lo largo de la mañana. Los motivos para tomar esa determinación eran dos, por una parte la confirmación de que el dinero va a seguir encontrando una excelente retribución en otros mercados -como demostró la subida en el tipo margin...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La inactividad empieza a perfilarse como la única forma de supervivencia para los mercados de valores, puesto que se ha llegado a un punto en el que lo más deseable es el estancamiento, por cuanto supone de freno a los recortes. El goteo a la baja parece ser la orientación más lógica de las cotizaciones, dadas las circunstancias, y esa postura fue la que se adoptó a lo largo de la mañana. Los motivos para tomar esa determinación eran dos, por una parte la confirmación de que el dinero va a seguir encontrando una excelente retribución en otros mercados -como demostró la subida en el tipo marginal de las letras del Tesoro-, y por otra la total indefinición de los mercados internacionales, que no empuja ni a comprar ni a vender, lo que en la bolsa suele traducirse en discretas posiciones vendedoras.Una de las consecuencias que acarrea este comportamiento es un notable descenso en el volumen negociado, situado en estos días en torno a los 7.000 millones de pesetas efectivas, cifra que incluye un buen número de aplicaciones que contribuyen generosamente a crear imagen de mercado.

El sector bancario fue de los pocos que se: mantuvo fiel a la trayectoria interna de la bolsa española, con un volumen negociado exactamente igual al del día anterior y unas cotizaciones que daban cuenta del predominio del papel. La discreta apertura de Wall Street volvió a favorecer el retroceso del papel, lo que hizo que el índice general terminara el día tal como lo comenzó, sin variación alguna.

Archivado En