El Sao Paulo apoya a su portero chileno Rojas, sancionado por la FIFA

El Sao Paulo, brasileño, ha decidido apoyar a su portero titular, el chileno Roberto Rojas, recientemente sancionado por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) con una suspensión general por tres meses y otra de por vida para intervenir en partidos internacionales. Rojas, que simuló haber sido alcanzado por una bengala durante el partido Brasil-Chile, el 3 de septiembre, en el estadio Maracaná de Río de Janeiro y correspondiente a la fase de clasificación para el Campeonato del Mundo de Italia 90, podría reintegrarse en su club en diciembre o, de desearlo, recibir su carta de ...

El Sao Paulo, brasileño, ha decidido apoyar a su portero titular, el chileno Roberto Rojas, recientemente sancionado por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) con una suspensión general por tres meses y otra de por vida para intervenir en partidos internacionales. Rojas, que simuló haber sido alcanzado por una bengala durante el partido Brasil-Chile, el 3 de septiembre, en el estadio Maracaná de Río de Janeiro y correspondiente a la fase de clasificación para el Campeonato del Mundo de Italia 90, podría reintegrarse en su club en diciembre o, de desearlo, recibir su carta de libertad."Lo que no se me ofrece en Chile, mi país, se me brinda desde Brasil", comentó Rojas, cuyo abogado, Néstor Gutiérrez, piensa formalizar hoy el recurso de apelación ante la FIFA para que al menos, reduzca el castigo en su reunión del 8 de diciembre en Roma. "Los brasileños, que podrían ser los más afectados por lo sucedido, me tienden su mano", prosiguió Rojas, "y el Sao Paulo me plantea reincorporarme a su plantilla o regalarme el pase para fichar por otro equipo. En cambio, mis directivos no se han dignado prestarme ayuda alguna".La intención de los actuales responsables de la federación chilena es investigar el asunto a fondo con el propósito de esclarecer lo sucedido, el verdadero origen de la herida de Rojas en la cabeza, y quedar en buen lugar ante la opinión pública mundial. En principio, algunos de ellos sospechan que todo fue un montaje de sus predecesores con el propósito de forzar con la retirada de los jugadores del campo que el encuentro se le diera por perdido a Brasil, que iba ganando por 1-0, o, en todo caso, se repitiera en un terreno neutral.