Prohibidas en París dos manifestaciones de la 'guerra del velo'

El prefecto (gobernador) de París ha prohibido la celebración de dos manifestaciones enmarcadas en la guerra del velo desencadenada en Francia tras la expulsión de un colegio de tres alumnas por llevar cubierta la cabeza según la tradición islámica. Las manifestaciones no fueron autorizadas "por perturbar el orden público". Una de ellas, organizada por el grupo integrista La Voz del Islam para reivindicar el uso del velo, debía desfilar el próximo domingo entre las plazas de la Bastilla y de la Nación.La otra manifestación, de signo contrario, estaba convocada por jóvenes francesas de o...

El prefecto (gobernador) de París ha prohibido la celebración de dos manifestaciones enmarcadas en la guerra del velo desencadenada en Francia tras la expulsión de un colegio de tres alumnas por llevar cubierta la cabeza según la tradición islámica. Las manifestaciones no fueron autorizadas "por perturbar el orden público". Una de ellas, organizada por el grupo integrista La Voz del Islam para reivindicar el uso del velo, debía desfilar el próximo domingo entre las plazas de la Bastilla y de la Nación.La otra manifestación, de signo contrario, estaba convocada por jóvenes francesas de origen magrebí que se oponen al uso del velo por considerarlo un "signo de opresión de la mujer". Pese a la prohibición, los organizadores mantuvieron la convocatoria, fijada para ayer por la noche.

Mientras se multiplican las críticas al ministro de Educación, Lionel Jospin, por autorizar en última instancia el velo en la escuela, el alcalde de Montfermeil, en la periferia de París, que se negaba a escolarizar a los hijos de los inmigrantes recién llegados, aplazó durante dos meses su decisión. Pierre Bernard, independiente de derechas, optó por retirar, con fecha 6 de noviembre, las subvenciones a dos parvularios que admitían a hijos de inmigrantes contra la voluntad del alcalde. Otro alcalde, Jean-Marie André, ha tomado la misma decisión en Beaucaire (departamento de Gard, sur de Francia), donde parte de la treintena de niños escolarizados por decisión del prefecto, no puede asistir al comedor, subvencionado por la alcaldía.