El Gobierno cierra el diálogo con ETA y anuncia acciones internacionales

"El Gobierno da por finalizado el diálogo". Con esta frase, el titular de Interior, José Luis Corcuera, anunció ayer que, tras la reanudación de la actividad terrorista, el Ejecutivo pone fin a las conversaciones abiertas en enero en Argel. Ayer mismo, una carta bomba enviada desde San Sebastián le estalló a un sargento del Ejército en Jaca (Huesca), y otro artefacto similar fue detectado antes de que llegara a Julen Elgorriaga, delegado del Gobierno en el País Vasco. Corcuera anunció que el Gobierno "se apoyará en la colaboración internacional".

Corcuera, quien se entrevistó con dirige...

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"El Gobierno da por finalizado el diálogo". Con esta frase, el titular de Interior, José Luis Corcuera, anunció ayer que, tras la reanudación de la actividad terrorista, el Ejecutivo pone fin a las conversaciones abiertas en enero en Argel. Ayer mismo, una carta bomba enviada desde San Sebastián le estalló a un sargento del Ejército en Jaca (Huesca), y otro artefacto similar fue detectado antes de que llegara a Julen Elgorriaga, delegado del Gobierno en el País Vasco. Corcuera anunció que el Gobierno "se apoyará en la colaboración internacional".

Corcuera, quien se entrevistó con dirigentes de varios partidos políticos para exponerles la situación, señaló tras estas conversaciones que el Ejecutivo "se ha esforzado en producir un diálogo que permita la desaparición de la violencia", pero que "la actitud de esta organización no permite pensar que se puede cambiar". "Desgraciadamente, la actitud de ETA de acabar unilateralmente con las expectativas suscitadas hace que el Gobierno dé por finalizado el diálogo con ETA", señaló.El vicelehendakari, José Ramón Jáuregui, mostró su confianza en que los etarras no permanezcan mucho más tiempo en Argelia, aunque el ministro prefirió no responder a la pregunta de si el Gobierno español, dentro de la colaboración internacional a la que se refirió, pedirá al Ejecutivo argelino que los etarras residentes en ese país sean expulsados.

Anoche, la agencia Efe, que citaba fuentes de Argel, afirmaba que las autoridades argelinas han señalado que no permitirán que ETA desestabilice la democracia española ni organice acciones terroristas desde Argelia. La agencia añadía que el Gobierno argelino tiene frente a sí no sólo la preocupación de tratar de resolver el grave problema de la violencia, sino que está obligado a tener en cuenta el impacto que tendría, ante sus otros interlocutores de la CE, una concesión de carácter político hacia los etarras.

En el comunicado que el Ejecutivo español hizo público el pasado día 5 se indicaba que el Gobierno seguía dispuesto a reanudar el diálogo con ETA, "para lo que es necesario se mantenga un clima de distensión y, en consecuencia, sin violencia".

El anuncio de ayer de Corcuera fue precedido por dos, nuevas acciones terroristas. El sargento Joaquín Bordonado, de 24 años y natural de San Mateo de Gállego (Zaragoza), destinado en la Escuela Militar de Alta Montaña de Jaca, recibió en su unidad una carta bomba que le produjo graves heridas en ambos manos, en el pecho y en un ojo.

También ayer, otra carta bomba fue interceptada por los servicios de seguridad antes de que llegara a su destinatario, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Julen Elgorriaga. Este dirigente socialista participó personalmente en los contactos que autoridades españolas mantuvieron en Argel con Antxon Etxebeste a finales de 1987 y comienzos de 1988.

Páginas 13 y 14 Editorial en la página 10

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