Venecia, sede de la Comisión para la Democracia a través del Derecho del Consejo de Europa

Venecia será la sede permanente de la Comisión para la Democracia a través del Derecho, el nuevo organismo que acaba de nacer en el seno del Consejo de Europa, que va a cumplir el 40º aniversario de su creación y que será relanzado gracias a esta iniciativa patrocinada por el Gobierno italiano. Así lo han decidido en dos días de congreso, celebrado en la Fundación Cini, de la preciosa isla de San Giorgio, representantes de los 21 países miembros del Consejo de Europa, entre los cuales se encontraban 18 ministros de Asuntos Exteriores y Justicia y la mayoría de los presentes de los Tribunales C...

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Venecia será la sede permanente de la Comisión para la Democracia a través del Derecho, el nuevo organismo que acaba de nacer en el seno del Consejo de Europa, que va a cumplir el 40º aniversario de su creación y que será relanzado gracias a esta iniciativa patrocinada por el Gobierno italiano. Así lo han decidido en dos días de congreso, celebrado en la Fundación Cini, de la preciosa isla de San Giorgio, representantes de los 21 países miembros del Consejo de Europa, entre los cuales se encontraban 18 ministros de Asuntos Exteriores y Justicia y la mayoría de los presentes de los Tribunales Constitucionales. Por parte española estuvieron presentes, entre otros, el ministro para las Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero; el subsecretario de Justicia, Liborio Hierro; el presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Tomás y Valiente, y el embajador español en Roma, Emilio Menéndez del Valle.La idea lanzada por el ministro Antonio La Pergola, en nombre del Gobierno italiano, de crear una especie de "magistratura cultural" o de laboratorio para producir democracia garantizada por el derecho", que servirá no sólo para los países occidentales sino también para aquellos que, como América Latina, están enraizados en nuestra cultura o para los países de la "otra Europa", que "se están despertando a la esperanza de nuevas libertades democráticas", como se subrayó en el congreso, ha sido bien acogida por todos los países del Consejo. Algunos de ellos, como el Reino Unido, Suiza y la RFA, pusieron en guardia acerca de los posibles "costes económicos" del nuevo organismo. Zapatero, que subrayó la importancia y prioridad que este organismo, encargado de "irradiar y promover la idea constitucional de las democracias emergentes", reviste para los países de Latinoamérica, aconsejó que su objetivo deberá, sin embargo, alcanzarse "con los menores costes administrativos y presupuestarios posibles".

Los detalles definitivos sobre la constitución y las funciones concretas del nuevo organismo deberán ser debatidos y aprobados por el Comité de Ministros.

El Gobierno argentino y la Federación Interamericana de Abogados enviaron sendos telegramas de adhesión a la iniciativa.

La presencia en Venecia de representantes de los Gobiernos de Yugoslavia y de Hungría, y la vehemencia con la que defendieron la creación del nuevo organismo puso de manifiesto las ansias que estos países del bloque socialista albergan de poder participar activamente en la democracia occidental.

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