Renfe no negociará un 'convenio franja' para los maquinistas, como pide el SEMAF
El director de personal de Renfe ha comunicado al secretario general del Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (SEMAF) que no se negociará un convenio franja (para sólo un colectivo de la empresa) para los maquinistas, como pide el sindicato. Y anuncia sanciones para quienes secunden la huelga de 58 días convocada por el SEMAF y que, según la empresa, es "ilícita y abusiva" porque impide trabajar al resto de la plantilla.
El SEMAF ha convocado 58 jornadas de huelga de 24 horas, que comenzarán el próximo día 18 y se extenderán hasta el 30 de junio del año que viene, p...
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El director de personal de Renfe ha comunicado al secretario general del Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (SEMAF) que no se negociará un convenio franja (para sólo un colectivo de la empresa) para los maquinistas, como pide el sindicato. Y anuncia sanciones para quienes secunden la huelga de 58 días convocada por el SEMAF y que, según la empresa, es "ilícita y abusiva" porque impide trabajar al resto de la plantilla.
El SEMAF ha convocado 58 jornadas de huelga de 24 horas, que comenzarán el próximo día 18 y se extenderán hasta el 30 de junio del año que viene, para conseguir que la dirección de la red acepte negociar un convenio colectivo específico para el personal de conducción.Vicente Castrillo, responsable de personal de Renfe, ha enviado una carta personal a los maquinistas y ayudantes de la empresa en la que les informa que "la simple participación en la huelga puede acarrear sanciones muy graves que la dirección no quisiera aplicar, pero que no tendrá más remedio que utilizar si se mantiene este tipo de convocatoria".
El argumento utilizado por Renfe es que esa modalidad de huelgas son consideradas iegales y abusivas según la legislación vigente y la sentencia del Tribunal Constitucional de 8 de marzo de 1981, basándose en que la participación de unos pocos trabajadores en la huelga impide el trabajo del resto de la plantilla.
La empresa cree que no tiene demasiado sentido reclamar un convenio franja sólo para el personal de conducción porque cree que los intereses de los maquinistas y ayudantes se pueden defender dentro de los del conjunto del resto de los ferroviarios.
En la carta que Vicente Castrillo dirige al secretario general del SEMAF, el director de personal asegura que los convenios franja, aunque están amparados por la doctrina jurisprudencial de los tribunales, es la empresa quien legalmente puede no prestarse a ello.
La dirección de Renfe hace unos días invitó formalmente a los representantes del SEMAF a participar en la comisión negociadora del convenio colectivo que para todos los ferroviarios se va a empezar a negociar. Sin embargo, el sindicato de maquinistas declinó tal ofrecimiento e impugnó, por el momento verbalmente, la composición de la citada comisión negociadora.
El SEMAF, al tener un 7% de los delegados totales de la empresa, no reúne la representatividad suficiente para negociar el convenio general. Agrupa a 3.500 afiliados, de los cuales 1.000 tienen doble militancia en UGT o CC OO. El total de maquinistas y ayudantes son 8.200, colectivo en el cual Comisiones tiene 88 delegados (el 41,12%); el SEMAF, 81 (37,85%); y UGT, 45 delegados (21,02%).
Aumentos del 7% al 8%
Comisiones y UGT han elaborado ya la plataforma que defenderán en el convenio colectivo para el conjunto de los trabajadores de Renfe y han pedido a la empresa que se inicien en breve las negociaciones. Las dos centrales reclaman un incremento salarial del 7% al 8% para 1989 en todos los conceptos, una vez aplicada la revisión salarial de este año.Asimismo piden reducción de la jornada semanal a 38 horas, distribuidas en cinco días de trabajo y dos de descanso, y calendario para la implantación de las 35 horas semanales; rebaja de la jornada nocturna o en instalaciones subterráneas a 35 horas; y recorte de una hora para cada trabajador o trabajadora por lactancia de hijo menor de nueve meses.
Los dos sindicatos defenderán la continuidad de la plantilla global y el mantenimiento de la edad de jubilación a los 64 años, con el 100% de la base reguladora.