La huelga deja a Francia sin televisión ni radio públicas

Los periodistas y técnicos de los canales franceses de televisión Antenne 2 y FR3, y el conjunto de las emisoras agrupadas bajo Radio France, de propiedad pública, se hallan en huelga desde ayer en reivindicación de un aumento y un reequilibrio de salarios y de una política de mayores inversiones del Estado. La huelga, de caracter indefinido, empezó en el principal canal de televisión pública, Antenne 2, el miércoles, y su detonante fue la contratación de Christine Ockrent como presentadora por un sueldo mensual de 120.000 francos (2.400.000 pesetas), que va a ser revisado probablemente hasta ...

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Los periodistas y técnicos de los canales franceses de televisión Antenne 2 y FR3, y el conjunto de las emisoras agrupadas bajo Radio France, de propiedad pública, se hallan en huelga desde ayer en reivindicación de un aumento y un reequilibrio de salarios y de una política de mayores inversiones del Estado. La huelga, de caracter indefinido, empezó en el principal canal de televisión pública, Antenne 2, el miércoles, y su detonante fue la contratación de Christine Ockrent como presentadora por un sueldo mensual de 120.000 francos (2.400.000 pesetas), que va a ser revisado probablemente hasta 80.000 francos (1.600.000 pesetas).Las emisoras ofrecen unos servicios mínimos, que se reducen, en el caso de Antenne 2, a un telefilme y dos informativos, uno de ellos conducido precisamente por la presentadora de sueldo polémico. La oferta televisiva queda limitada ahora a las cuatro televisiones privadas, que se hallan en excelente situación para aprovechar la crisis desencadenada en el sector público.

La huelga coincide con el inicio de contactos entre el primer ministro, Michel Rocard, y los dirigentes de los partidos políticos, para consensuar la nueva ordenación de los medios de comunicación públicos y la creación de un Alto Consejo de los Audiovisuales, que debe sustituir a la Comisión Nacional para la Comunicación y las Libertades, implantada por el anterior Gobierno, conservador.

Los principales afectados por la huelga son los directores de los medios de comunicación, nombrados por el Gobierno conservador, al que los trabajadores acusan de haber descapitalizado y abandonado la radio y la televisión del Estado en provecho de los medios privados. Michel Rocard, aunque desea reordenar el sector y hallar el lugar exacto que deben ocupar los medios del Estado, no quiere destituir a los directivos nombrados por su antecesor Jacques Chirac, para no empañar su socialismo dialogante y de apertura.

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