Cartas al director

Reverencia

En el artículo del señor Escohotado Convicción y reverencia se afirma: "Ias (convicciones) que no exigen conformidad ajena prueban ser sólidas...; las que exigen conformidad ajena tienen muy poco de convicción y mucho de reverencia".Si aplicamos este curioso criterio a la propia afirmación del autor, la frase antes entrecomillada ¿sería una convicción sólida o una reverencia'?

Está claro que si fuese una convicción sólida no recesitaría ser expresada en un artículo destinado a convencer a otros de algo. Parece, por tanto, una convicción falsa o reverencia; es decir, el señor Esco...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

En el artículo del señor Escohotado Convicción y reverencia se afirma: "Ias (convicciones) que no exigen conformidad ajena prueban ser sólidas...; las que exigen conformidad ajena tienen muy poco de convicción y mucho de reverencia".Si aplicamos este curioso criterio a la propia afirmación del autor, la frase antes entrecomillada ¿sería una convicción sólida o una reverencia'?

Está claro que si fuese una convicción sólida no recesitaría ser expresada en un artículo destinado a convencer a otros de algo. Parece, por tanto, una convicción falsa o reverencia; es decir, el señor Escohotado critica las convicciones que exigen conformidad ajena precisamente exigiendo conformidad ajena para su tesis.

Este despropósito lógico aparece al haber seguido el autor el mismo esquema de razonamiento de un conocido sofisma presocrático: "Las verdades universales no existen, y esto es una verdad universal. La incoherencia está servida.-

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En