La IAAF da 30 días a la federación británica para que tome medidas contra Zola Budd

Zola Budd, la atleta británica nacida en Surafrica ha sido acusada por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) de Infringir el espíritu de las normas que prohíben la participación de deportistas en el país africano. La IAAF ha asumido una rebuscada acusación por haber "tomado parte" en una competición en su país de origen y ha concedido el plazo de un mes a su federación para que tome medidas contra ella. Budd acaba de ser añadida a la lista negra que las Naciones Unidas compilan con quienes han prestado su colaboración al régimen racista de Pretoria.

Budd, de 21 años, se defend...

Zola Budd, la atleta británica nacida en Surafrica ha sido acusada por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) de Infringir el espíritu de las normas que prohíben la participación de deportistas en el país africano. La IAAF ha asumido una rebuscada acusación por haber "tomado parte" en una competición en su país de origen y ha concedido el plazo de un mes a su federación para que tome medidas contra ella. Budd acaba de ser añadida a la lista negra que las Naciones Unidas compilan con quienes han prestado su colaboración al régimen racista de Pretoria.

Budd, de 21 años, se defendió ayer infructuosamente en Londres de la acusación de haber violado la norma que prohibe a los deportistas intervenir en Suráfrica. A Budd se le acusaba de haber "tomado parte" en una reunión en 1987 en Brakspan, lo que, en principio, la colocaría al margen del mundo atlético,El caso venía coleando desde que se publicó una foto en la que, presuntamente, aparecía Budd compitiendo. Más tarde se comprobó que la persona retratada no era la ex campeona del mundo de cross, sino otra corredora con la que guarda un cierto parecido físico. La indignación inicial provocada por este incidente reavivó la presiones de los países africanos contra ella, que fue retirada de los Campeonatos del Mundo del mes pasado en Nueva Zelnda por la amenaza de boicoteo que pendía sobre ellos.

Previamente a su comparecencia de ayer, Budd había enviado a la IAAF una declaración jurada negando que hubiera intervenido en ninguna carrera en Suráfrica, extremo admitido por miembros de la propia federación, aunque la corredora reconoce que asistió como espectadora.La interpretación amplia de la vigente prohibición que han hecho algunos representantes de la IAAF entiende que Budd había "tomado parte" en el encuentro deportivo porque su presencia lo había promocionado. Éste es el punto de vista que ayer decidió asumir el consejo de la IAAF, cinco de cuyos integrantes estaban anoche redactando el comunicado que hoy va a hacerse público.

Uno de sus miembros declaró que, aunque es verdad que Budd no ha participado en ningún acto deportivo, "está claro que ha infringido el espíritu de las reglas al aparecer calentándose en la pista o recibiendo ramos de flores. Eso favorece la propaganda del régimen racista surafricano".

Los asesores legales de la atleta, que ha contado con todo el apoyo de la federación británica, a la que esta pretensión le parece ridícula, habían manifestado que esa interpretación era insostenible, pues la referencia a "tomar parte" está claramente en el apartado relativo a la "competición".Negligencia

La IAAF no sólo no ha admitido este argumento, sino que ha acusado a la federación británica de actuar con negligencia.A esta federación se le va a dar un mes de plazo para que tome medidas contra la corredora. «Si no, las tomaremos nosotros", dijo la misma fuente.

Sólo tres de los 23 miembros del consejo que ayer estudió el caso Budd son africanos, pero la IAAF ha optado por .no comprometer la participación de 50 países" en los Juegos Olímpicos de Seúl.

La parte británica había insinuado que, de darse el fallo que se ha producido, recurriría a los tribunales del Reino Unido, de los que depende la federación por tener su sede en Londres, ante los que parece altamente improbable que la IAAF pudiera ganar.