Desde Madrid se ve La Meca

La primera mezquita de la villa, en el barrio de Tetuán, se abrirá en dos meses

La primer mezquita de Madrid ocupa 3.500 metros de tierra en el distrito madrileño de Tetuán, sobre el espacio donde se encontraba una antigua fábrica de muebles. Pero esta mezquita, situada en un barrio construido sobre el campamento de los soldados españoles que regresaron del sitio de Tetúan tras vencer a los moros, será por poco tiempo la mayor mezquita de Madrid. Dentro de un año está prevista la inauguración del gran centro islámico que se construye junto a la M-30 con dinero del rey Fahd de Arabia. Un tercer proyecto de mezquita, respaldado por Marruecos, prevé la construcción de otra e...

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La primer mezquita de Madrid ocupa 3.500 metros de tierra en el distrito madrileño de Tetuán, sobre el espacio donde se encontraba una antigua fábrica de muebles. Pero esta mezquita, situada en un barrio construido sobre el campamento de los soldados españoles que regresaron del sitio de Tetúan tras vencer a los moros, será por poco tiempo la mayor mezquita de Madrid. Dentro de un año está prevista la inauguración del gran centro islámico que se construye junto a la M-30 con dinero del rey Fahd de Arabia. Un tercer proyecto de mezquita, respaldado por Marruecos, prevé la construcción de otra en el barrio del Pilar.

En este "complejo religioso-sociocultural", como lo define Riay Tatary, presidente de la Asociación Musulmana de España, se podrá dejar a los niños en la guardería mientras se ora, consultar los libros sagrados en la biblioteca, aprender árabe y español en sus aulas y comer en su restaurante.Junto a las habitaciones del iman hay otras para recibir invitados y dar cobijo a visitantes. La totalidad de los servicios comenzarán a funcionar dentro de un par de meses con una fiesta de inauguración. La mole de cemento color marfil y mármol, que desafía los colores grises de las oficinas y viviendas que comparten la misma calle estrecha, parece que ha sido depositada por algún genio de lámpara.

Tiene ascensor para sus cuatro plantas, circuito cerrado de televisión y una pantalla gigante de vídeo, situada en una estancia adyacente, desde donde se pueden seguir las oraciones en los días multitudinarios. Los numerosos servicios higiénicos decorados, al igual que el resto de la mezquita con mosaico árabe, poseen duchas para las purificaciones.

La mezquita llevará el nombre del primer califa musulman de la primera era, Abu Bakr. A pesar de que la Asociación Musulmana está integrada en España por un centenar de personas a las primeras celebraciones religiosas celebradas la semana pasada, asistieron 400 personas de los 10.000 musulmanes que residen en Madrid.

Moqueta caramelo

De momento, en el edificio se apilan los libros árabes, zapatillas y las alfombras que utilizan los musulmanes para orar y esperan que llegue la moqueta color caramelo que cubrirá el suelo de la sala de oraciones. En la primera planta una celosía de madera separa la zona reservada para las mujeres en el lugar dedicado a la oración.El acceso a la mezquita puede realizarse en automóvil y llegar en el ascensor sin necesidad de acceder por la puerta delantera, un gran patio de mármol adornado con una fuente. Desde el alminar de tres esferas representando las fases lunares, coronado por una media luna que mira a La Meca, se ven los rascacielos de la Castellana. Una empresa española se ha encargado de la realización de las obras, cuyo coste hasta el momento es de 250 millones de pesetas.

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Un arquitecto cordobés, Juan Mora Urbano, que ya realizó la mezquita que existe en Marbella, es el autor del proyecto. Mora declaró que se trataba de integrar el proyecto dentro de la ciudad y realizar un lugar funcional por las necesidades sociales del edificio. El arquitecto diferenció este trabajo del que él mismo realizó en Marbella para la familia real saudí: "Este edificio, en al que he tratado de dotar de formas originales debe ser popular, al igual que el barrio dónde está encuadrado". Para que sirva como lugar de reunión y aliviar las estrecheces de la calle, Mora ha construido un atrio en la entrada que servirá de lugar de reunión. La moderna mezquita madrileña, inspirada en el arte hispano-árabe, tiene su altar exactamente orientado a La Meca: 27 grados Sur a Este.

Qatar, Jordania, Siria y Arabia Saudí han colaborado en este proyecto, que ha sido financiado: "fundamentalmente por musulmanes del mundo", según declaró Tatary, que resaltó su carácter "marcadamente popular".

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