Muere un piloto al estrellarse un F-16 de EE UU en Cuenca
Un avión norteamericano F-16 con base en Torrejón de Ardoz se estrelló ayer a 35 kilómetros de Cuenca, en el término municipal de Parras de las Vegas, resultando muerto su piloto, cuyos restos fueron encontrados por la Guardia Civil pasadas las doce de la noche de ayer, según informa Europa Press.Los restos del cazabombardero, perteneciente al ala táctica 401 de la USAF -integrada por 3 escuadrones y un total de 72 aparatos, tema clave de las negociacones hispano-norteamericanas sobre reducción de las bases-, fueron encontrados por la Guardia Civil hacia las siete de la tarde, tras un intenso ...
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Un avión norteamericano F-16 con base en Torrejón de Ardoz se estrelló ayer a 35 kilómetros de Cuenca, en el término municipal de Parras de las Vegas, resultando muerto su piloto, cuyos restos fueron encontrados por la Guardia Civil pasadas las doce de la noche de ayer, según informa Europa Press.Los restos del cazabombardero, perteneciente al ala táctica 401 de la USAF -integrada por 3 escuadrones y un total de 72 aparatos, tema clave de las negociacones hispano-norteamericanas sobre reducción de las bases-, fueron encontrados por la Guardia Civil hacia las siete de la tarde, tras un intenso rastreo.
La base aérea de Torrejón perdió a las 3.15 la conexión por radar y comunicaciones con el F-16, en vuelo de rutina y entrenamiento. A partir de ese momento, un Aviocar y dos helicópteros, uno español y otro norteamericano, empezaron a rastrear la zona, y no consiguieron divisar ningún rastro del avión.
Cuando comenzó a oscurecer, la Guardia Civil prosiguió la búsqueda a pie y hacia las siete de la tarde localizaron un cráter bastante profundo con los restos del F-16, una vez dirigidos a una zona donde fueron alertados por unos pastores que al parecer le vieron caer.
El pasado 16 de diciembre otro F-16 norteamericano estacionado en Torrejón se estrelló contra el suelo en los alrededores de Moratilla de los Meleros, cerca de Pastrana (Guadalajara). El unico tripulante, el coronel estadounidense Edward Manguis, resultó ileso al conseguir saltar en paracaídas.