Las motivaciones del 'conductor suicida' varían segun su edad, afirman los psiquiatras

El perfil de los conductores que han provocado accidentes por circular en sentido contraria en las carreteras madrileñas ha variado desde los primeros casos aparecidos hasta los últimos automovilistas detenidos. "Los primeros eran jóvenes de 25 a 30 años, que habían bebido y que apostaban; normalmente había una mujer en medio", explica el psiquiatra José Miguel López Ibor. "La población ha ido envejeciendo, los protagonistas ya no beben y ya no existe una mujer ni una apuesta", explica. "La horas también son distintas" añade el doctor López Ibor, "antes los accidentes se producían en el amanec...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El perfil de los conductores que han provocado accidentes por circular en sentido contraria en las carreteras madrileñas ha variado desde los primeros casos aparecidos hasta los últimos automovilistas detenidos. "Los primeros eran jóvenes de 25 a 30 años, que habían bebido y que apostaban; normalmente había una mujer en medio", explica el psiquiatra José Miguel López Ibor. "La población ha ido envejeciendo, los protagonistas ya no beben y ya no existe una mujer ni una apuesta", explica. "La horas también son distintas" añade el doctor López Ibor, "antes los accidentes se producían en el amanecer, ahora ocurren alrededor de la medianoche".

López Ibor es uno de los psiquiatras que están siguiendo este nuevo fenómeno social y que considera que sería interesante elaborar un informe completo sobre la mentalidad de los detenidos. Según señala, el poco espacio que Televisión Española, el medio de comunicación con mayor audiencia, está dedicando a este tipo de accidentes puede ser una de las causas por las cuales el fenómeno no se ha extendido fuera de la comunidad madrileña. Este psiquiatra no considera probable que los accidentes tengan origen en una equivocación; "la sensación que deben sentir es la misma que tiene un español cuando conduce un coche en Inglaterra".Para el doctor Jerónimo Saiz, jefe clínico de psiquiatría del hospital Ramón y Cajal, sólo una minoría de los autores de estos accidentes pertenece al grupo de conductores suicidas". Saiz, que no considera que se pueda englobar en un mismo grupo a los protagonistas de estos enfrentamientos circulatorios, explica que su denominador- común sería en todo caso la búsqueda del riesgo, circunstancia que está determinada incluso genéticamente por la alteración de una enzima llamada la monoaminooxidasa.

"Está probado", opina el psiquiatra Carlos Castilla del Pino, "que una persona sometida a un shock cólerico tiende a utilizar el automóvil con imprudencia tanto para autoagredirse como para agredir". El factor narcisista es también significativo en los accidentes en la carretera, sobre todo en los varones, opina Castilla del Pino; las personas suelen alterarse cuando se las adelanta o se las insulta.

Los psiquiatras consultados destacan la importancia del mimetismo como posible origen de la multiplicación de este tipo de hechos. Castilla del Pino destaca la imitación de actos delictivos, y pone como ejemplo que el primer atraco bancario con maleta bomba sólo tardó en imitarse 15 días. El psiquiatra Alfonso Calvé habla también de la contaminación que produce la información, como ocurrió con la violencia en los estadios", y el afán de notoriedad. También el doctor Saiz apunta este fenómeno y explica cómo se reproducen los casos de suicidios de colegiales después de que sean noticia en los medios de comunicación.

Suicidio ampliado

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Jerónimo Saiz, que no piensa que la personalidad de todos estos individuos responda a las conductas suicidas, explica que dentro de la medicina legal existe la figura de "suicidio ampliado" en el que el suicida suele acabar con la vida de su familia para librarla de los sufrimientos futuros que le atormentan, aunque es poco habitual que este tipo de suicidios se amplíe fuera de la unidad familiar.Alfredo Calcedo, catedrático de psiquiatría de la universidad Complutense, piensa que los jóvenes que efectúan este tipo de acciones ejercían conductas de riesgo, "como el juego de la ruleta rusa", por ansias de ganar notoriedad en su grupo y de demostrar valentía. "Para saber a qué grupo pertenecen las últimas personas detenidas de unos 50 años de edad debería estudiarse su situación económica, laboral y familiar y su grado de frustración o desesperación". El doctor Calcedo afirma, sin embargo, que hasta que no estén juzgados, una vez se busque la sanción específica para este nuevo fenómeno", no será fácil estudiar a estos individuos, que dicen desconocer lo ocurrido.

Para el profesor Calcedo el problema estriba en establecer "cuánto de error, cuánto de distracción, cuánto de imprudencia, de prepotencia, cuánto de resentimiento, cuánto de ánimo suicida, cuánto de agotamiento, cuánta tasa de drogas ha habido en estos accidentes". El catedrático recuerda que existe el suicidio como fin, y otras veces el suicidio es un incidente secundario a la satisfacción de un móvil determinado".

Los doctores coinciden en afirmar que tanto el alcohol como las drogas potencian los comportamientos violentos. "El alcohol disuelve el superyo", recuerda Castilla del Pino.

Archivado En