La Embajada española tramita la repatriación de los montañeros catalanes muertos en el Himalaya

Las autoridades consulares españolas en la India prosiguen las gestiones para conseguir la repatriación de los cadáveres de los cuatro montañeros españoles que fallecieron el pasado domingo en el Lhotse Shar, en el Himalaya, la séptima cumbre más alta del mundo, con sus 8.400 metros. La dificultad de comunicaciones y el hecho de que el miércoles fuera una fiesta importante, tanto en Nepal, donde se encuentran los cuerpos de los montañeros, como en la India, están retrasando la recuperación de los cadáveres y su traslado a España. El mal tiempo impidió también las primeras labores de rescate....

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Las autoridades consulares españolas en la India prosiguen las gestiones para conseguir la repatriación de los cadáveres de los cuatro montañeros españoles que fallecieron el pasado domingo en el Lhotse Shar, en el Himalaya, la séptima cumbre más alta del mundo, con sus 8.400 metros. La dificultad de comunicaciones y el hecho de que el miércoles fuera una fiesta importante, tanto en Nepal, donde se encuentran los cuerpos de los montañeros, como en la India, están retrasando la recuperación de los cadáveres y su traslado a España. El mal tiempo impidió también las primeras labores de rescate.

"Las autoridades nepalíes, con las que estamos en contacto, nos han prometido hacer todo lo posible y cuanto antes para comunicarse con el resto de la expedición, ayudarles en su descenso y proceder al traslado de los cadáveres", dijo el portavoz de la Embajada de España en Nueva Delhi, la encargada de los asuntos relacionados con Nepal, ya que en este país no hay representación diplomática española.El lunes 28, al día siguiente del accidente, los cuatro miembros del campamento base, a 5.180 metros de altitud, iniciaron la búsqueda de sus cuatro compañeros accidentados, que habían salido del campo cuatro, a 7.350 metros, para atacar la cima. La cordada localizó los cuatro cuerpos, que eran visibles, en un glaciar, a unos 6.000 metros, por lo que parece quedar descartado como causa del accidente un alud, ya que éste los habría enterrado por completo. De todas formas, la causa real del accidente no se conocerá hasta que se entre en rontacto con el resto de la expedición.

La tragedia se produjo cuando la cordada trataba de escalar el Lhotse Shar por su cara suroeste.

Según la versión de los familiares, los cuatro montañeros, Antoni Sors, de 38 años; Antonio Quiñones, de 27; Francisco Porras, de 30, y Sergi Escalera, de 33, todos ellos de Barcelona, fueron arrastrados por la rotura de una cornisa o por el desprendimiento de una placa de nieve o de hielo. El área más peligrosa de la montaña ya había sido pasada, ya que está situada entre los 5.600 y los 6.800 metros, donde deben superarse pendientes de 70 grados con nieve y hielo.

Al no poder llegar al glaciar, los otros cuatro integrantes de la expedición decidieron regresar a Katmandú, donde se les espera el día 9. Familiares de los expedicionarios, entre los que están las esposas de Sors y Escalera, se encontraban en Nepal y tenían previsto reunirse con ellos en el campamento base. Estos familiares trataron el miércoles de alquilar una avioneta para llegar hasta el glaciar y recuperar los cuerpos, pero el mal tiempo parecía descartar esta operación.

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