Cartas al director

Librero

Me refiero a la columna titulada Librero, firmada por Francesc Arroyo, en EL PAÍS del 24 de septiembre.Efectivamente, como bien apunta el señor Arroyo, nadie se ha hecho rico aún ejerciendo de librero en este país. Y justamente por eso pienso que la decisión de abrir una librería y no una boutique en estos tiempos que soplan, dice mucho sobre las personas que emprenen esta aventura. ¿Malos profesioneles? No lo niego, para casos determinados. ¿Y no tendríamos aquí que hablar tambien de una total falta de formación regulada y de unos requisitos mínimos para el ejercicio de esta pro...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Me refiero a la columna titulada Librero, firmada por Francesc Arroyo, en EL PAÍS del 24 de septiembre.Efectivamente, como bien apunta el señor Arroyo, nadie se ha hecho rico aún ejerciendo de librero en este país. Y justamente por eso pienso que la decisión de abrir una librería y no una boutique en estos tiempos que soplan, dice mucho sobre las personas que emprenen esta aventura. ¿Malos profesioneles? No lo niego, para casos determinados. ¿Y no tendríamos aquí que hablar tambien de una total falta de formación regulada y de unos requisitos mínimos para el ejercicio de esta profesión? ¿Y de las editoriales que mandan una información necesaria muchas veces mal, tarde o nunca?

Más información

No obstante, lo que más me indignó fue el tema del libro de texto, mezclado en la columna de forma aberrante, con toda la anterior temática. Creo que poco sabe el señor Arroyo de la problemática específica del libro de texto, de editoriales y distribuidoras que venden directamente a asociaciones de padres de alumnos y particulares con descuentos que equivalen a nuestro margen de ganancia- Heide Braun. .

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En