Los liberales británicos aprueban la fusión con los socialdemócratas
El Partido Liberal británico decidió ayer por abrumadora mayoría de los asistentes al congreso que celebra en Harrogate iniciar negociaciones con el Partido Social Demócrata (SDP) para disolver ambos grupos y crear un tercer partido en el Reino Unido con vocación de romper el rígido sistema bipartidista existente. El líder liberal, David Steel, dijo que el nuevo grupo será algo "nuevo y atractivo".La jornada que vivieron ayer los liberales estuvo marcada por intensos sentimientos de alegría y pesar. Suponía decir adiós a uno de los más viejos partidos británicos para crear otro nuevo junto...
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El Partido Liberal británico decidió ayer por abrumadora mayoría de los asistentes al congreso que celebra en Harrogate iniciar negociaciones con el Partido Social Demócrata (SDP) para disolver ambos grupos y crear un tercer partido en el Reino Unido con vocación de romper el rígido sistema bipartidista existente. El líder liberal, David Steel, dijo que el nuevo grupo será algo "nuevo y atractivo".La jornada que vivieron ayer los liberales estuvo marcada por intensos sentimientos de alegría y pesar. Suponía decir adiós a uno de los más viejos partidos británicos para crear otro nuevo junto con el más joven de todos ellos.
Ninguno de los dos ha saboreado la mieles del poder gubernamental en tiempos recientes. Los socialdemócratas, porque nacieron hace casi siete años y Margaret Thatcher no les ha dado ninguna opción, y los liberales, desde los años veinte.
Los debates estuvieron marcados por una intensa voluntad de lograr el éxito de la fusión. Al final, en una votación a mano alzada, la práctica totalidad de los reunidos aceptó que se emprendan negociaciones con los socialdemócratas.
El camino que queda por delante no está exento de obstáculos, pero la necesidad que ambos grupos tienen de lograr el éxito contribuirá a allanar las dificultades.
Las mayores discrepancias derivarán de la estructura organizativa de que ha de dotarse el nuevo partido y de la posición a adoptar ante el armamento nuclear, sin olvidar que en las filas socialdemócratas hay un porcentaje de afiliados contrarios a la fusión que podría llegar a paralizar el proceso.
La agenda de las negociaciones se inicia hoy mismo con el nombramiento por parte liberal del equipo negociador.
Las dos fuerzas deberán tener ultimadas para enero los objetivos y directrices políticas generales del nuevo partido, que serán sometidas a votación de ambos grupos en febrero. El proyecto de las dos partes es que haya un nuevo partido en condiciones de competir en las elecciones muncipales del próximo mes de mayo.