Cultura califica de imprudente la falta de consulta de la federación

Fuentes del Ministerio de Cultura calificaron de imprudente el hecho de que la Federación Española de Fútbol designara la sede de Melilla sin consultar previamente con el Consejo Superior de Deportes (CSD). Dicho organismo, que subvenciona a la federación, investigaba ayer cuál había sido el proceso del caso. La federación tampoco advirtíó a la Administración de su decisión de última hora de cambiar el escenario entre Melilla y Coría del Río, dando por buena de esta forma la orden de la UEFA.El Consejo Superior de Deportes tuvo noticia ayer del conflicto porque desconocía la sede en la que iba...

Fuentes del Ministerio de Cultura calificaron de imprudente el hecho de que la Federación Española de Fútbol designara la sede de Melilla sin consultar previamente con el Consejo Superior de Deportes (CSD). Dicho organismo, que subvenciona a la federación, investigaba ayer cuál había sido el proceso del caso. La federación tampoco advirtíó a la Administración de su decisión de última hora de cambiar el escenario entre Melilla y Coría del Río, dando por buena de esta forma la orden de la UEFA.El Consejo Superior de Deportes tuvo noticia ayer del conflicto porque desconocía la sede en la que iba a celebrarse el encuentro. Portavoces autorizados mostraron su sorpresa por lo ocurrido, así como por el cambio de escenario. "El CSD no tiene competencias ni para designar el escenario de un partido internacional, ni para autorizar el cambio del mismo. Las federaciones solicitan la autorización para los partidos, con el objeto de que se compruebe que existen o no problemas diplomáticos con el país con el que se va a jugar. No era este el caso con la República Federal de Alemania, pero no teníamos conocimiento de que el partido iba a jugarse en Melilla", afirmaron fuentes del CSD, que comenzaron a recabar ayer mismo de la federación de fútbol toda la documentación oficial del caso.

Un portavoz autorizado del Ministerio de Asuntos Exteriores se remitió, por su parte, tal y como viene siendo habitual en la Administración durante este último mes, a las declaraciones del presidente del Gobierno, Felipe González, durante el debate sobre el estado de la Nación. "Ceuta y Melilla son ciudades españolas" repitió el citado diplomático, mientras se negaba a emitir cualquier otra opinión.