Cartas al director

Audiencia Nacional

Me permito dirigir a usted, con el ruego de su publicación, la presenté carta, relativa al artículo insertado en EL PMS del sábado 7 de febrero, bajo el título Ni Audiencia Nacional ni Provincial, del que es autor el profesor Simeno Sendra. En dicho artículo, cuya tesis central no discuto -antes bien comparto-, se desliza una afirmación con relación a la Audiencia Nacional, debida probablemente a un lapsus calami, que creo ha de ser rectificada. Se trata de la siguiente frase: "La Audiencia Nacional río es hoy el Tribunal de Orden Público, aunque haya podido heredar de aquella il...

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Me permito dirigir a usted, con el ruego de su publicación, la presenté carta, relativa al artículo insertado en EL PMS del sábado 7 de febrero, bajo el título Ni Audiencia Nacional ni Provincial, del que es autor el profesor Simeno Sendra. En dicho artículo, cuya tesis central no discuto -antes bien comparto-, se desliza una afirmación con relación a la Audiencia Nacional, debida probablemente a un lapsus calami, que creo ha de ser rectificada. Se trata de la siguiente frase: "La Audiencia Nacional río es hoy el Tribunal de Orden Público, aunque haya podido heredar de aquella ilegítima jurisdicción especial el conocimiento de los delitos de terrorismo". Pues bien, ni siquiera en eso la Audiencia Nacional, tratada con absoluta corrección en el trabajo, es heredera del tribunal citado, ya que la competencia en aquella materia proviene directamente de la Jurisdicción militar, como puede verse en el Real Decreto-ley 3/ 1977, de 4 de enero.Por otra parte, es conveniente añadir, aunque no se discuta en el artículo de que se trata, que la Audiencia Nacional es algo más que el órgano jurisdiccional que conoce de los delitos de terrorismo, como lo prueban tanto la Sala de lo Contencioso-Administrativo, que la integra desde su creación, y la Sala de lo Social, que, conforme a la vigente ley orgánica del Poder Judicial, formará parte de ella, como, dentro del mismo orden penal, la atribución del enjuiciamiento de numerosos delitos ajenos a los antes expresados, de destacada incidencia en la vida nacional y de los que mencionaré únicamente, por la próxima celebración de los juicios orales corre spondiente s, los que son objeto de los sumarios conocidos colo qui alm ente por el gran público como del síndrome tóxico o de la colza y el de Sofico- Presidente de la Audiencia Nacional. .

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