A la espera de Alemão

Ricardo de Brito, más conocido por su flisico y pelo rubio como Alemáo (alemán), centrocampista brasileño de 25 años,que milita en el Botafogo, es el jugador que está a punto de fichar el Atlético como segundo extranjero. Las gestiones, a través de un intermediario que ya ofreció a Alemáo en agosto del año pasado con ocasión del torneo Teresa Herrera, están muy avanzadas y apenas quedan pendientes los flecos finales.El Atlético desea que Alemáo, titular de la selección brasileña en el pasado Mundial de México 86, firme un contrato por lo que resta de temporada con una opción de compra por los ...

Ricardo de Brito, más conocido por su flisico y pelo rubio como Alemáo (alemán), centrocampista brasileño de 25 años,que milita en el Botafogo, es el jugador que está a punto de fichar el Atlético como segundo extranjero. Las gestiones, a través de un intermediario que ya ofreció a Alemáo en agosto del año pasado con ocasión del torneo Teresa Herrera, están muy avanzadas y apenas quedan pendientes los flecos finales.El Atlético desea que Alemáo, titular de la selección brasileña en el pasado Mundial de México 86, firme un contrato por lo que resta de temporada con una opción de compra por los próximos tres años. En un principio, esta primera fase de la operación, de cerrarse de esta forma, le costaría al club rojiblanco unos 250.000 dólares (algo más de 32 millones de pesetas). De ejercer la opción de compra al final, el Atlético Podría pagar entonces una cantidad muy próxima a los 100 raillones.

El Atlético sólo cuenta con un extranjero, el uruguayo Jorge da Silva, delantero centro, que es suplente. Y todos sus pasos para intentar fichar a su segundo extranjero -el alemán occidental Mathaus, los brasileños Jandir y Alemão y el argentino Batista- se han encaminado a fortalecer el centro del campo con un jugador que se convierta en el eje del equipo, posición que ocupa Landáburu, o que se mueva por la banda derecha, en la que actúa Julio Prieto. Los técnicos del Atlético consíderan que hace falta un jugador agresivo y de calidad que sepa cortar el ritmo al adversario e iniciar, a la vez, la organización del juego propio.