El INI quiere limitar los primeros resultados positivos de Iberia en el último decenio
Iberia y su único accionista -el Instituto Nacional de Industria (INI)- llegaron ayer a un acuerdo para cerrar el balance de resultados de la compañía aérea del año 1986, que probablemente presentará sus primeros números positivos en el último decenio. El INI pretende limitar el alcance de los beneficios registrados y pasar una parte de ellos a reservas.El pago en el ejercicio de dos aviones vendidos por Iberia a Aviaco hace tres años constituía una de las claves de los resultados finales que presentará la compañía. Al parecer, Iberia habría aceptado,que el ingreso de 1.200 millones por la ven...
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Iberia y su único accionista -el Instituto Nacional de Industria (INI)- llegaron ayer a un acuerdo para cerrar el balance de resultados de la compañía aérea del año 1986, que probablemente presentará sus primeros números positivos en el último decenio. El INI pretende limitar el alcance de los beneficios registrados y pasar una parte de ellos a reservas.El pago en el ejercicio de dos aviones vendidos por Iberia a Aviaco hace tres años constituía una de las claves de los resultados finales que presentará la compañía. Al parecer, Iberia habría aceptado,que el ingreso de 1.200 millones por la venta de estos dos aparatos aparezcan como resultados atípicos en el balance de la sociedad correspondiente a 1986, en lugar de pasar directamente por la cuenta de resultados.
A finales del mes de noviembre, sin cerrar todavía el mes de diciembre, Iberia arrojaba unosbeneficios de explotación de algo más de 400 millones de pesetas.
En el último Informe Comercial Económico-Financiero (más conocido como ICEF), correspondiente al mes de diciembre, la dirección de Iberia obvió concretar
la cifra de beneficios y evitar así anticipar la política que presentaría al accionista en cuantro al tratamiento contable de su resultado de explotación.
1.000 millones
Según fuentes fiables, Iberia habría obtenido unos resultados positivos superiores a los 1.000 millones de pesetas en 1986, debido fundamentalmente al recorte experimentado en los costes de los querosenos y a la disminución de los gastos financieros. Un tratamiento contable que discutía en parte el accionista permitíría presentar unos beneficios incluso superiores en 1986, frente a unas pérdidas de algo más de 9.000 millones en el anterior.La distribución de notas críticas anóminas en torno a que este balance de Iberia está hinchado con el ingreso extraordinario derivado de la enajenación de dos aparatos a la compañía Aviaco habría aconsejado a última hora al presidente de Iberia, Narcis Andreu, la presentación de una política más moderada en relación a los resultados que, según fuentes próximas al accionista, podrían quedar algo por debajo de los 1.000 millones de pesetas. Al mismo tiempo, Aviaco presentaría unos beneficios del orden de los 800 millones de pesetas, pese a que ha desembolsado 1.200 millones en el ejercicio para hacer frente a los aviones adquiridos hace dos años.
En la reunión del Consejo de Administración de Iberia celebrada ayer, el INI e Iberia habrían decidido cerrar finalmente la polémica con un acuerdo que, en último extremo, tendrá que ser ratificado al más alto nivel. Luis Carlos Croissier, ministro de Industria y Energía, se encontraba ayer en París.