Nervios ante la proximidad de la cota máxima anual

Las cotizaciones se encuentran en un nivel crítico y todos los acontecimientos en los mercados de valores giran en torno a este hecho, pues tanto la especulación como las tomas de posiciones o las realizaciones de beneficios se mueven en función de la altura de los precios. El importante test que supone el anterior máximo anual ha quedado al alcance de la mano, ya que tan solo 60 centésimas separan al índice del mercado madrileño de su cota más alta, único objetivo a alcanzar una vez superado el 200%.Los nervios han estado presentes en todo momento, sobre todo en aquellos corros en los que la ...

Las cotizaciones se encuentran en un nivel crítico y todos los acontecimientos en los mercados de valores giran en torno a este hecho, pues tanto la especulación como las tomas de posiciones o las realizaciones de beneficios se mueven en función de la altura de los precios. El importante test que supone el anterior máximo anual ha quedado al alcance de la mano, ya que tan solo 60 centésimas separan al índice del mercado madrileño de su cota más alta, único objetivo a alcanzar una vez superado el 200%.Los nervios han estado presentes en todo momento, sobre todo en aquellos corros en los que la especulación ha entrado con más fuerza. En esas ocasiones cualquier variación, por mínima que fuese, ha hecho salir papel o dinero a toda prisa, alterando de este modo la trayectoria alcista de algunos valores y obligándoles a registrar movimientos contrarios en el transcurso de los diez minutos del corro. En estas ocasiones todo se toma por una señal de algo concreto, y así, cuando el dinero no entra con la decisión esperada, la lectura que se hace es la de que se ha llegado al momento final de la subida, con lo que la puesta en marcha de las órdenes de venta no se hace esperar y la acción de cada uno hace que se cumplan los propios temores.

Los mercados quedan casi con la misma disposición de las jornadas anteriores, en las que los resultados establecían una clara divisoria entre los tres grandes sectores y el resto, pues la actuación de bancos, eléctricas y comunicaciones queda bajo el dominio del papel, mientras que el dinero se reserva para aquellos valores que responden con más agilidad a los impulsos especulativos. En casi todos los casos, la inversión a corto plazo sigue los pasos de los compradores extranjeros, moviéndose según se tenga la sensación de que continúan con su actitud, o bien se mantienen a la espera de acontecimientos. A éste respecto, la proximidad del 204,23% es el origen de casi todas las tensiones que se han dado en esta sesión, pues los seguidores de los charts aguardan la ruptura de esta cota para mantenerse en posiciones compradoras o, por el contrario, vender si no se llega a esa situación.

El único de los tres grandes sectores del mercado que consiguió cerrar con un nuevo avance fue el bancario, pero de tan solo 77 centésimas. Los siete grandes soportaron la presión vendedora sin grandes pérdidas y en los pocos casos en los que el dinero fue predominante se consiguieron avances de 11 y 26 enteros. El volumen negociado ascendió hasta 477.000 títulos, gracias a que Banesto registró una contratación de 237.000. El resto de estos valores fue vendedor con un total de 37.733 títulos, aunque en la mayor parte de los casos se retiraron cantidades importantes.

La situación al cierre no mostraba ninguna confianza en las posibilidades de saltar el máximo anual, pues la oferta conseguía imponerse en la mayoría de los casos. Aun así hay que esperar los resultados de la contratación de la tarde para evaluar las posibilidades de esta sesión.