La junta nacional de AP destituye al presidente del partido en Cantabria

Jesús Díaz, presidente de AP de Cantabria y senador por Coalición Popular tras las últimas elecciones, fue destituido ayer por la junta directiva nacional de su partido, que designó una junta gestora presidida por Ignacio Beltrán, de 32 años de edad, farmaceútico e industrial, teniente de alcalde de obras en el Ayuntamiento de Santander y cuya familia tiene antiguos vínculos de amistad con Manuel Fraga.La composición de la gestora reúne a profesionales cuya edad media no supera los 33 años, lo que se interpreta como un deseo de la junta nacional de recurrir a los jóvenes cuadros del par...

Jesús Díaz, presidente de AP de Cantabria y senador por Coalición Popular tras las últimas elecciones, fue destituido ayer por la junta directiva nacional de su partido, que designó una junta gestora presidida por Ignacio Beltrán, de 32 años de edad, farmaceútico e industrial, teniente de alcalde de obras en el Ayuntamiento de Santander y cuya familia tiene antiguos vínculos de amistad con Manuel Fraga.La composición de la gestora reúne a profesionales cuya edad media no supera los 33 años, lo que se interpreta como un deseo de la junta nacional de recurrir a los jóvenes cuadros del partido en Cantabria, presuntamente enojados por la mala imagen de quienes hasta ahora manejaron Alianza Popular en Cantabria.

Se atribuye a Alfonso Osorio, vicepresidente del partido, la presunta presentación a Manuel Fraga de un amplio informe elaborado durante su permanencia en Cantabria durante la reciente campaña electoral.

La actuación del presidente Jesús Díaz batallando por el logro de un escaño en el Senado suscitó entre los jóvenes aliancistas críticas notorias, dado el carácter excesivamente personalista que aquél imprimió a su campaña electoral, de la que salió triunfante.

En favor de Hormaechea

La fulminante decisión de Manuel Fraga de destituir a Jesús Díaz y dar entrada en la gestora a personas todavía no gastadas por el quehacer político, se contempla como un urgente deseo de recomponer y consolidar el partido en Cantabria, de darle una nueva imagen dentro del caos que vive, en estos momentos, la derecha regional. No faltan los que ven en semejante decisión, no esperada en Cantabria, la entrega del partido a Juan Hormaechea, alcalde de Santander, presunto candidato de la derecha a la Presidencia del Gobierno autónomo en las elecciones del año próximo. Ignacio Beltrán, el hombre que encabeza la gestora propugnada por Fraga, es considerado como uno de sus más eficaces y honestos colaboradores que, llegado el momento, no disimulan sus críticas al regidor de la ciudad.Por lo que se refiere al PDP de Cantabria, el comité local de Santander ha solicitado la dimisión del presidente, Ambrosio Calzada, y son numerosos los miembros del ejecutivo del partido, entre ellos el vicepresidente del Gobierno regional, Lucas Martínez, y los consejeros Luis del Río y Félix Hinojal, que también aconsejan y pretenden la expulsión de aquél. Calzada, considera que "dimitir" es sinónimo de "huir". Hoy viajará a Madrid, donde el comité de disciplina de su partido le pedirá cuentas por su incomparecencia en el pleno del viernes pasado, que determinó la designación de un senador socialista por la comunidad autónoma e hizo que la asamblea aprobara unos votos particulares de socialistas y regionalistas en los que el Gobierno queda muy en entredicho respecto de su gestión económica y de la eficacia de sus actuaciones.