Redactado el pliego de cargos contra el Sabadell

Las acusaciones que figuran en el pliego de cargos que el Comité de Competición ha redactado contra el presidente y vicepresidente del Sabadell, los hermanos Rafael y Miguel Arroyos, en caso de probarse, según el reglamento disciplinario del fútbol, presupone el descenso del club y la inhabilitación de los directivos. Fernando Vara de Rey, secretario del Comité de Competición, es el instructor del expediente abierto a los dirigentes del Sabadell por su presunta intervención en el intento de compra del árbitro cacereño Ceballos Borrego, que dirigió el partido que el club catalán jugó en Ovi...

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Las acusaciones que figuran en el pliego de cargos que el Comité de Competición ha redactado contra el presidente y vicepresidente del Sabadell, los hermanos Rafael y Miguel Arroyos, en caso de probarse, según el reglamento disciplinario del fútbol, presupone el descenso del club y la inhabilitación de los directivos. Fernando Vara de Rey, secretario del Comité de Competición, es el instructor del expediente abierto a los dirigentes del Sabadell por su presunta intervención en el intento de compra del árbitro cacereño Ceballos Borrego, que dirigió el partido que el club catalán jugó en Oviedo. Fernando Vara de Rey redactó ayer el pliego de cargos, para remitirlo a los implicados, e informó del asunto al comisario Luis Luengo, jefe de la brigada policial encargada de averiguar los presuntos amaños de partidos.El Comité de Competición tiene constancia, por la propia declaración de Miguel Arroyos, que éste se trasladó a Cáceres junto con el intermediario Luis Argemí, quien intentó comprar al árbitro Ceballos Borrego, lo que se considera falta muy grave e inmersa en los artículos 23 y 72 del reglamento disciplinario. Miguel Arroyos expuso en su declaración otros motivos diferentes para justificar su viaje. La falta de coincidencia en las declaraciones del dirigente del Sabadell, del intermediario y del árbitro, será trabajo a realizar por la policía, a la que el Comité de Competición solicitó su ayuda para reforzar sus conclusiones. El Sabadell, por su parte, anunció ayer que pensaba presentar una nueva querella contra Argemí.

Este presunto intento de compra de un árbitro está contemplado en el artículo 23 del reglamento de régimen disciplinario del fútbol, que textualmente establece: "Los clubes que ofrezcan, prometan o entreguen a árbitros o jueces de línea: dádivas o presentes con el fin, claro o encubierto, de obtener un arbitraje parcial serán sancionados con el descenso de división o categoría". El artículo 72 señala que Ios dirigentes cuya conducta fuese constitutiva de atentado muy grave a la disciplina, al buen orden deportivo, al respeto debido a sus autoridades o las normas que lo regulan, serán sancionados con suspensión de uno a cuatro años".

El Sabadell tendrá un plazo de 10 días, a partir de la fecha de la recepción del pliego de cargos, para presentar alegaciones.

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