Los extranjeros podrán pedir desde su país de origen el permiso para trabajar en España

Los extranjeros que deseen trabajar en España podrán solicitar el permiso correspondiente desde la embajada u oficina consular. española de sus países de origen antes de llegar a nuestro país. El proyecto será estudiado el próximo viernes en Consejo de Ministros. Este reglamento ha sido elaborado según el espíritu de la ley de Extranjería, en vigor desde el pasado 1 de julio.

Los ministerios que han colaborado en su elaboración son Interior, Asuntos Exteriores y Trabajo y Seguridad Social. Hasta el momento, sólo un pequeño número de extranjeros, unos 43.000, ha solicitado regulariza...

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Los extranjeros que deseen trabajar en España podrán solicitar el permiso correspondiente desde la embajada u oficina consular. española de sus países de origen antes de llegar a nuestro país. El proyecto será estudiado el próximo viernes en Consejo de Ministros. Este reglamento ha sido elaborado según el espíritu de la ley de Extranjería, en vigor desde el pasado 1 de julio.

Los ministerios que han colaborado en su elaboración son Interior, Asuntos Exteriores y Trabajo y Seguridad Social. Hasta el momento, sólo un pequeño número de extranjeros, unos 43.000, ha solicitado regularizar su situación. El resto, entre 250.000 y 500.000, permanece en situación ilegal.

Otro de los objetivos del proyecto es regular la presencia de los extranjeros en España ordenando el proceso de entrada. Además, será prohibida la entrada a las personas que ya hayan sido expulsadas.

Ningún empresario podrá utilizar el trabajo de un extranjero que no tenga el correspondiente permiso. El citado texto enumera un total de 13 posibles infracciones a lo dispuesto en la ley de Extranjería, entre ellas la de ejercer la mendicidad o desarrollar actividades ilegales.

Éstas serán sancionadas por el Ministerio del Interior con multas de hasta dos millones de pesetas; por la Dirección de la Seguridad del Estado, con multas de hasta un millón de pesetas, y por los gobernadores civiles, con multas de hasta medio millón de pesetas.

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