Tribuna:

El cierre confirma el buen momento de las bolsas

El dinero vuelve a estar presente en los mercados de valores ante la posibilidad de que nuevamente se produzca una tendencia al alza duradera. La previsible baja de los tipos de interés empuja nuevamente a los inversionistas a buscar mejores oportunidades en la renta variable, lo que, de momento, se ha traducido en la consecución de nuevos máximos anuales. Tan sólo el sector eléctrico, en pleno proceso de ajuste de sus dividendos, ha mostrado cierta debilidad al proseguir adecuando las cotizaciones a la situación particular de cada compañía.La contratación, que a lo largo de la semana no ha co...

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El dinero vuelve a estar presente en los mercados de valores ante la posibilidad de que nuevamente se produzca una tendencia al alza duradera. La previsible baja de los tipos de interés empuja nuevamente a los inversionistas a buscar mejores oportunidades en la renta variable, lo que, de momento, se ha traducido en la consecución de nuevos máximos anuales. Tan sólo el sector eléctrico, en pleno proceso de ajuste de sus dividendos, ha mostrado cierta debilidad al proseguir adecuando las cotizaciones a la situación particular de cada compañía.La contratación, que a lo largo de la semana no ha conseguido superar los 8.000 millones de pesetas efectivas de media diaria, se reactivará otra vez, con lo que posiblemente alcance nuevamente el nivel de Ios 10.000 millones. A pesar de que el nivel de la contratación no se encuentra en sus máximos, en la próxima semana se igualará la cifra total de contratación de acciones del ejercicio pasado, que con casi 500.000 millones de pesetas efectivas fue considerado como un año histórico, en el que se pulverizaron todos los récords anteriores.

La sesión resultó muy desigual debido a los ajustes que se están produciendo en el grupo eléctrico, en donde las sociedades que pueden ver disminuido su dividendo registraron pequeños recortes que establecen unas diferencias aún más claras entre estos valores. No obstante, y adelantándose a los acontecimientos, el mercado ya había venido depurando los precios, por lo que no parece que se vayan a producir diferencias mayores. La contratación en este sector resultó muy animada y no, se dio la sensación de que el papel presionase demasiado. Debido a esta circunstancia, se estima que estas órdenes de venta pueden provenir del corto plazo, más interesado en las plusvalías que en la rentabilidad.

La confianza en el sector bancario no ha sido todo lo grande que cabía esperar del grupo que ha sido el inductor de esta nueva tendencia, tal vez por la propia altura de los precios, pues los saldos se mostraron muy equilibrados, sin lograr definir al final una posición clara para los siete grandes. Compras y ventas presentaban una diferencia de tan sólo 3.000 títulos a favor de las últimas, aunque la contratación se recuperó ligeramente y se situó en 663.000 títulos. La segunda fila, sin embargo, ha recuperado con bastante fuerza el tren de las subidas, una vez limpiado su entorno de algunas. posiciones especulativas.

Ha sido en los sectores industriales en donde se ha concentrado la mayor parte de la demanda, en muchos casos insatisfecha, ya que son estos valores los que parecen ofrecer las mejores alternativas.. El número de valores que hubieron de publicar posición de dinero sin operaciones resultó muy elevado, lo que vuelve a poner de manifiesto la escasez de papel que registran los mercados. También Telefónica se sumó a la corriente alcista, y hay que destacar que sólo dos grupos, electricidad y varios, tuvieron subidas inferiores a un punto, mientras que los demás superaron los 2,22.

Los pagarés del Tesoro, mientras tanto, han reducido la banda en la que se mueven los tipos de interés, recuperando parte de las bajas de las sesiones anteriores.

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