Los canales de televisión privada podrán adjudicarse a empresas no informativas

Los canales de televisión privada podrán adjudicarse a sociedades no relacionadas con los medios de comunicación. Ni siquiera será criterio preferente, a la hora de otorgar las concesiones, que los solicitantes estén relacionados con el mundo informativo. Así se pone de manifiesto en un escrito reservado enviado por el Gobierno a AP como base para las negociaciones en curso para llegar a un consenso sobre la regulación de la televisión privada. Estas negociaciones se reanudarán el jueves y se espera que constituyan el último capítulo de las reuniones entre socialistas y populares antes de que ...

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Los canales de televisión privada podrán adjudicarse a sociedades no relacionadas con los medios de comunicación. Ni siquiera será criterio preferente, a la hora de otorgar las concesiones, que los solicitantes estén relacionados con el mundo informativo. Así se pone de manifiesto en un escrito reservado enviado por el Gobierno a AP como base para las negociaciones en curso para llegar a un consenso sobre la regulación de la televisión privada. Estas negociaciones se reanudarán el jueves y se espera que constituyan el último capítulo de las reuniones entre socialistas y populares antes de que el Gobierno inicie sus contactos con otras fuerzas parlamentarias.

Carlos Robles Piquer, cabeza de los negociadores de AP sobre la televisión privada, afirmó que hay "bastante acuerdo" con los socialistas, al menos sobre las líneas generales del documento -de tan sólo dos folios y medio- enviado por el Gobierno. Este texto es apenas una síntesis de los puntos más relevantes del anteproyecto y en él se insiste en el carácter transitorio del número de concesiones, limitado, en un primer período, a tres canales.A partir del vencimiento de las primeras concesiones (10 años), ese número podrá ser mantenido o variado por el Plan Técnico de la Televisión Privada. Coalición Popular insiste en mostrarse favorable a la máxima libertad de creación de canales.

Existen varios puntos concretos en los que Coalición Popular se muestra en desacuerdo con el contenido de las líneas generales que les han sido enviadas por el Gobierno; especialmente, en lo que se refiere a la exigencia de que al menos un 40% de la programación emitida sea de producción propia, porcentaje que parece excesivo a los populares. La oposición pretende también incrementar el control parlamentario sobre las televisiones privadas.

Tanto las fuentes gubernamentales como las de AP consultadas por este periódico insisten en negar que en las negociaciones entre socialistas y populares se haya abordado la eventual concesión de uno de los tres canales iniciales a alguna sociedad próxima a los planteamientos de la Coalición Popular.

Una vez concluidas las negociaciones con AP, el Gobierno iniciará contactos con los restantes grupos parlamentarios.

Por el momento, las fuentes gubernamentales consultadas por este periódico insisten en que mientras no estén concluidas las negociaciones con todos los grupos parlamentarios y, al menos hasta anoche, aún no se habían producido las correspondientes llamadas desde la Moncloa- no podrá hablarse de la existencia de un proyecto de ley como tal, sino, simplemente, de "borradores", lo que contrasta fuertemente con el deseo de enviar rápidamente el texto al Parlamento.

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