Asturiana del Zinc estudia un plan para reducir de 300 a 600 empleos

La empresa Asturiana del Zinc (AZSA) pondrá en marcha un plan para mejorar sus resultados y que prevé la reducción de plantilla o la regulación temporal del empleo, una considerable rebaja en la producción y el recorte de las inversiones, incluidas las destinadas a la investigación. AZSA pasa por un momento apurado como consecuencia de las tarifas eléctricas que se ve obligada a pagar, la bajada en la cotización del dólar y la reducción del precio del zinc en el mercado internacional.La empresa asturiana baraja la posibilidad de solicitar un expediente de regulación de empleo que podría afecta...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La empresa Asturiana del Zinc (AZSA) pondrá en marcha un plan para mejorar sus resultados y que prevé la reducción de plantilla o la regulación temporal del empleo, una considerable rebaja en la producción y el recorte de las inversiones, incluidas las destinadas a la investigación. AZSA pasa por un momento apurado como consecuencia de las tarifas eléctricas que se ve obligada a pagar, la bajada en la cotización del dólar y la reducción del precio del zinc en el mercado internacional.La empresa asturiana baraja la posibilidad de solicitar un expediente de regulación de empleo que podría afectar entre 300 y 600 trabajadores de los 2.400 de la plantilla. También es posible que la producción, cifrada en 170.000 toneladas anuales, pase a ser de 100.000, aproximadamente, y que se reduzcan drásticamente las inversiones. Entre las que suspenderían se encuentran 3.500 millones de pesetas destinados a programas de investigación, lo que significaría un retraso en la tecnología punta de AZSA, empresa pionera en la producción de zinc electrolítico, cuya patente ha exportado a numerosos países del mundo.

El mayor problema de AZSA es el derivado de la aplicación de tarifas eléctricas corrientes y no especiales, como en el caso de las industrias transformadoras del aluminio o el silicio. El Ministerio de Industria tan sólo ha rebajado 50 céntimos por kilovatio/hora, cifra que no soluciona los problemas de la empresa, que abonó 4.500 millones por energía eléctrica el año pasado, el 55% de los costes de producción.

Según fuentes de la entidad en Europa, las empresas productoras de zinc sí disponen de ventajas y exenciones en el consumo de energía.

En unos 300 millones de pesetas al mes en lo que va de año se han cifrado las pérdidas de Asturiana del Zinc. La principal factoría de la empresa -que es autosuficiente y que comprende el ciclo completo de producción desde la extracción en las minas hasta el producto final- se encuentra en San Juan de Nueva, a la entrada del puerto de Avilés.

Archivado En