Dos naves de Fuenlabrada que almacenaban papel, destruidas en un incendio

Un incendio de grandes proporciones destruyó ayer dos naves industriales de la empresa Sagar, en las que almacenaba papel usado para su reciclaje, situadas en la calle de Molinaseca, en el polígono, industrial de Cobo Calleja, en la localidad de Fuenlabrada. A última hora de la tarde los bomberos aún trabajaban para extinguir el fuego, que se había iniciado alrededor de las cinco de la madrugada y que destruyó unas 6.000 toneladas de papel. El gerente de la empresa manifestó que los daños, se evalúan en 150 millones de pesetas

El fuego, que podía divisarse desde la carretera de Toledo, ...

Un incendio de grandes proporciones destruyó ayer dos naves industriales de la empresa Sagar, en las que almacenaba papel usado para su reciclaje, situadas en la calle de Molinaseca, en el polígono, industrial de Cobo Calleja, en la localidad de Fuenlabrada. A última hora de la tarde los bomberos aún trabajaban para extinguir el fuego, que se había iniciado alrededor de las cinco de la madrugada y que destruyó unas 6.000 toneladas de papel. El gerente de la empresa manifestó que los daños, se evalúan en 150 millones de pesetas

El fuego, que podía divisarse desde la carretera de Toledo, fue muy espectacular, y una densa humareda cubrió la zona durante toda la mañana. Trozos de pared enteros se habían venido abajo y tres furgonetas de reparto que se encontraban dentro de las naves resultaron también destruidas. Los bomberos aseguraron que era difícil precisar las causas del siniestro, dado que el material almacenado era altamente inflamable. Las dos naves, que ocupaban una extensión de 5.000 metros cuadrados, se utilizaban para almacenar papel usado y prensado, que posteriormente se vende a las papeleras para la fabricación de papel. El foco del incendio, según la misma fuente, podría haberse originado muchas horas antes de que el fuego se descubriera. En la zona existen varias empresas que se dedican a la misma actividad.

Numerosas personas se concentraron a lo largo del día frente al almacén para observar las tareas de extinción que llevaban a cabo los bomberos. Ocho coches autobombas y dos cisternas de 8.000 litros de agua permanecían en el lugar del suceso a primeras horas de la tarde. Los bomberos aseguraron que la extinción completa podría durar varios días, porque se trata de balas de papel prensado en las que el agua no penetra con facilidad.

Uno de los accionistas de la librería Pueyo, situada en la calle del Arenal, es el propietario de las naves siniestradas y de otra más situada en la misma zona. El gerente de la empresa precisé que la cuantía de los daños supera los 150 millones de pesetas y que "las naves habían quedado de siniestro total".