Cartas al director

Trabajo y escuela pública

El motivo de mi carta es exponerle mi rabia e impotencia por un suceso cuyas consecuencias, con la publicación de esta carta, creo que podrá paliarse en parte. Se trata de la apertura del período de contratación, en régimen de interinidad, para cubrir las vacantes y sustituciones que se produzcan en el cuerpo de profesores de EGB que presten sus servicios en la Dirección Provincial de Madrid. En otras palabras, puestos de trabajo en la escuela pública para los maestros, en gran medida parados o subempleados.Recurro a usted porque, sin entrar en otro tipo de consideraciones -como las referidas ...

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El motivo de mi carta es exponerle mi rabia e impotencia por un suceso cuyas consecuencias, con la publicación de esta carta, creo que podrá paliarse en parte. Se trata de la apertura del período de contratación, en régimen de interinidad, para cubrir las vacantes y sustituciones que se produzcan en el cuerpo de profesores de EGB que presten sus servicios en la Dirección Provincial de Madrid. En otras palabras, puestos de trabajo en la escuela pública para los maestros, en gran medida parados o subempleados.Recurro a usted porque, sin entrar en otro tipo de consideraciones -como las referidas a la oportunidad y motivo de tales contrataciones-, la forma de convocatoria, tal y como se ha producido, hace de ésta todo menos una convocatoria "pública": un simple papel en el tablón de anunciose la citada Dirección Provincial de Educación y Ciencia de Madrid, con un plazo de 10 días, a contar a partir del pasado 2 de enero (sin especificación alguna del número de plazas). No se ha dado difusión en otros medios de comunicación. Si a esto unimos los requisitos que se piden para presentar solicitud (certificados, documentos compulsados, etcétera), difíciles de obtener en tales fechas, todo parece indicarnos un propósito cercano al amiguismo y al enchufismo en la citada convocatoria.

Téngase en cuenta, por otra parte, que los sindicatos, o al menos algunos, han sido simplemente convocados por telegrama (recibido la víspera) a una reunión, sin orden del día alguno y en la que no tuvieron posibilidad de modificar un baremo del que desconocerán su aplicación concreta y, ni tan siquiera, si tal acción va a producirse, pues hasta ese extremo se reserva la Administración.

Ójala que estas breves líneas de denuncia y crítica de una actuación de improvisación y atropello se merezcan la generosidad de su periódico.-

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