Londres deja a la Unesco en medio de una ola de críticas en Europa

El Gobierno británico decidió ayer, desoyendo la opinión de sus aliados europeos y la propia oposición interna, abandonar la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El secretario adjunto del Foreign Office, Timothy Raison, anunció ayer tarde ante el Parlamento que la primera ministra, Margaret Thatcher, cumpliría con su amenaza de retirarse de la organización el próximo día 31, al no aceptarse las reformas que Londres exigía.

El Gobierno del Teino Unido acusa a la Unesco, como lo hizo Estados Unidos al retirarse de la misma organización h...

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El Gobierno británico decidió ayer, desoyendo la opinión de sus aliados europeos y la propia oposición interna, abandonar la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El secretario adjunto del Foreign Office, Timothy Raison, anunció ayer tarde ante el Parlamento que la primera ministra, Margaret Thatcher, cumpliría con su amenaza de retirarse de la organización el próximo día 31, al no aceptarse las reformas que Londres exigía.

El Gobierno del Teino Unido acusa a la Unesco, como lo hizo Estados Unidos al retirarse de la misma organización hace un año, de llevar una política antioccidental y de estar mal administrada económicamente. En la última conferencia de la organización, clausurada el mes pasado en Sofía, se introdujeron reformas, consideradas insuficientes por el Gobierno británico. Tras el abandono de Washington y Londres, la Unesco pierde casi el 30% de su presupuesto (EE UU aportaba el 25%, y el Reino Unido, el 4,6%).Francia, la RFA y Japón habían pedido anteriormente al Reino Unido que permaneciese en la organización para defender sus puntos de vista. Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores español manifestó ayer: "Aunque compartimos algunas de las críticas al funcionamiento de la Unesco, deploramos la decisión británica de abandonar la organización, porque consideramos importante el principio de universalidad en las organizaciones de la ONU y porque creemos que la solución a estos problemas debe ser buscada desde dentro".

El Gobierno holandés expresó su "pesar" por la decisión añadiendo que las reformas "habían permitido hacer progresos considerables". Un portavoz belga subrayó que su país no se retiraría de la Unesco, al tiempo que admitía que "se habían tenido en cuenta las observaciones para mejorar su funcionamiento". Finalmente, Canadá excluía que fuera a asumir la representación de Londres en la organización al anunciar que "sería desconocer a Canadá pensar que su delegación va a hacer de portavoz de nadie". Canadá se declaraba satisfecho de las reformas realizadas en la Unesco. Página 2

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