Los evangélicos españoles

Le suplico que publique las siguientes líneas relacionadas con la noticia de prensa aparecida en su diario del 30 de octubre, en el sentido de que los evangélicos españoles van a suscribir pactos con el Estado, ya que contiene algunas inexactitudes de peso.

1. La mayoría de los evangélicos-españoles se mantiene fiel a la tradición de separación de Iglesia y Estado que ha sostenido en este país por más de un siglo y, por tanto, no tiene ningún interés en suscribir ningún pacto con el Estado español. 2. El Comité de Defensa Evangélico apenas representa al 40% de los evangéli...

Le suplico que publique las siguientes líneas relacionadas con la noticia de prensa aparecida en su diario del 30 de octubre, en el sentido de que los evangélicos españoles van a suscribir pactos con el Estado, ya que contiene algunas inexactitudes de peso.

1. La mayoría de los evangélicos-españoles se mantiene fiel a la tradición de separación de Iglesia y Estado que ha sostenido en este país por más de un siglo y, por tanto, no tiene ningún interés en suscribir ningún pacto con el Estado español. 2. El Comité de Defensa Evangélico apenas representa al 40% de los evangélicos españoles. Así, a título de ejemplo, baste decir que las Iglesias Filadelfia, que es la denominación evangélica más numerosa de España, agrupando al 60% de los evangélicos españoles, no se halla presente en tal comité, ni desea estarlo en el futuro. Tampoco se hallan presentes en el mismo multitud de iglesias evangélicas que van desde los reformados independientes a los menonitas, pasando por infinidad de grupos. 3. Alguno de los grupos que figuran como miembros del Comité de Defensa ni siquiera lo son de manera total. Así, las asambleas de hermanos no están vinculadas en su plenitud, y muchas de ellas son ardientes enemigas de firmar pactos del Estado, por considerarlo de claro constantinianismo. 4. Los adventistas del Séptimo Día no son evangélicos. Puede que su reducido número les haya aconsejado unirse al Comité de Defensa Evangélico para pactar con el Estado, pero ahí termina toda su relación con las iglesias evangélicas. 5. La influencia social de los grupos fuera del Comité de Defensa Evangélico gira alrededor del medio millón de personas (si es que no lo supera) y de nuevo las cantan.

Por tanto, no es que los evangélicos van a pactar con el Estado, sino, que una minoría considerable de los mismos (entre el 307. y el 40%) desea hacerlo, en contra de toda una línea de coherencia histórica. Otra cosa es que lo logren.-

Pastor evangélico.