El Gobierno niega haber realizado recientemente una oferta de negociación a ETA

Rafael Vera, subsecretario del Interior, negó ayer a EL PAÍS que el Gobierno haya efectuado recientemente una oferta de negociación a ETA Militar. Vera insistió en que la única ocasión en que se hizo un llamamiento a la organización terrorista para negociar fue en agosto del pasado año, desmintiendo así informaciones llegadas a este periódico que aseguraban que el Gobierno había dirigido a ETA Militar una oferta de negociación en el pasado mes de mayo, a través de miembros de la ejecutiva de Euskadiko Ezkerra. Esta oferta de negociación, según estas fuentes, contemplaba la excarcelación de los...

Rafael Vera, subsecretario del Interior, negó ayer a EL PAÍS que el Gobierno haya efectuado recientemente una oferta de negociación a ETA Militar. Vera insistió en que la única ocasión en que se hizo un llamamiento a la organización terrorista para negociar fue en agosto del pasado año, desmintiendo así informaciones llegadas a este periódico que aseguraban que el Gobierno había dirigido a ETA Militar una oferta de negociación en el pasado mes de mayo, a través de miembros de la ejecutiva de Euskadiko Ezkerra. Esta oferta de negociación, según estas fuentes, contemplaba la excarcelación de los presos de la organización terrorista.

Esta última oferta de negociación, califícada de "amplia y generosa" por las mismas fuentes, fue transmitida en la segunda quincena del pasado mes de mayo a Domingo Iturbe Abasolo, Txomin, considerado el número uno de ETA Militar. La oferta ha sido realizada a través de Euskadiko Ezkerra. El Gobierno, aseguran dichas fuentes, ha descartado una negociación directa con los terroristas, convencido del fracaso inevitable de una negociación desarrollada en esas circunstancias, y considera insustituible la figura de un auténtico intermediario.Esta propuesta se atendría a la fórmula de la "doble negociación" aprobada por el Parlamento de la comunidad autónoma vasca e incluida en el pacto de legislatura firmado por socialistas y el Gobierno vasco. Esta fórmula propone en la primera de sus fases que ETA y el Ministerio del Interior aborden conjuntamente todo lo relativo al fin de la violencia, a la entrega de las armas, a la excarcelación de los etarras presos y a la legalización de las situaciones del resto de los activistas de ETA Militar.

En la segunda fase, la totalidad de las fuerzas políticas vascas, incluida Herri Batasuna, establecerían las bases de un sólido consenco político, asumiendo inicialmente todo tipo de planteamientos políticos, entre ellos el de la alternativa KAS, que defienden ETA y Herri Batasuna.

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