Un sindicato de policias, favorable a la negociación con ETA
La Unión Sindical de Policía (USP), colectivo minoritario del Cuerpo Superior de Policía, someterá a debate en su próximo congreso uila ponencia sobre terrorismo en la que se perfila un pronunciamiento favorable a la negociación del Gobierno con ETA, concretamente con el sector menos proclive al mantenimiento de la lucha armada: el que capitanea Domingo Iturbe Abasolo, Txomin. Es la primera vez que un colectivo policial, en este caso el más progresista de la corporación, se muestra favorable al diálogo con miembros de esta organización terrorista.La ponencia de la USP, organización ...
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La Unión Sindical de Policía (USP), colectivo minoritario del Cuerpo Superior de Policía, someterá a debate en su próximo congreso uila ponencia sobre terrorismo en la que se perfila un pronunciamiento favorable a la negociación del Gobierno con ETA, concretamente con el sector menos proclive al mantenimiento de la lucha armada: el que capitanea Domingo Iturbe Abasolo, Txomin. Es la primera vez que un colectivo policial, en este caso el más progresista de la corporación, se muestra favorable al diálogo con miembros de esta organización terrorista.La ponencia de la USP, organización a cuyo frente se encuentra el inspector Modesto García, está redactada desde una perspectiva más política que policial y dedicada prácticamente al fenómemo de ETA Militar, a la que divide en dos sectores: el nacionalista y el marxista-leninista. Sobre ambos dice textualmEnte: "Sabida es la existencia, desde sus mismos orígenes, en el seno de la organización ETA de diferentes tendencias ideológicas. De todas ellas, las dos que en la actualidad gozan de mayores cotas de poder son las de los nacionalistas, enmarcadas sus reivindicaciones tácticas en la alternativa KAS, y la marxista-leninista, cuyo objetivo prioritario es la revolución socialista y el derecho a la autodeterminación".
"La totalidad de las escisiones producidas en ETA ha sobrevivido como consecuencia de la contradicción entre estas dos tendencias, que, en ocasiones, creó situaciones insostenibles", continúa la ponencia. "El pivote ideológico sobre el que se asienta ETA es el Movimiento de Liberación Nacional. En consecuencia, es el factor nacional el problema fundamental a resolver". Y agrega: "Curiosamente, la tendencia política menos belicosa es la nacionalista. Si el Gobierno confirma su competencia manteniendo la colaboración internacional en materia antiterrorista, consíderamos que esta política debe hacerse buscando el fortalecimiento político del sector representado por Txomin, en detrimento del marxista-leninista".
La USP, en esta ponencia, "apoya y felicita al Gobierno español por su política de reinserción social y al francés por el sustantivo cambio operado en su política sobre refugiados, especialmente, respecto a los militantes de ETA". El apoyo se extiende prácticamente al conjunto de la política antiterrorist,a del Gobierno.
Hipótesis
A juicio de este sindicato policial, que sin embargo no considera válida una negociación con ETA como "unidad monolítica", la conclusión de la negociación del Gobierno daría lugar a lo siguiente:1. "La permanencia de un grupo reducido de militantes de ETA que insistiera en su activismo armado".
2. "La vuelta a casa de significados militantes, tras una negociación, erosionaría, aún más si cabe, las condiciones objetivas favorables a la lucha armada, disminuyendo con ello la competencia moral de los irreductibles".
3. "El comienzo de un gran debate político sobre nacionalismo y lucha armada en el seno de Herri Batasuna".
4. La permanencia de ese grupo minoritario en el activismo armado les condena, irremediablemente, desaparecidas las condiciones objetivas de la lucha armada, a ser una especie de foco urbano convencido de que la acción por sí misma es capaz de producir su objetivo revolucionario.
Sobre el tercer punto, la ponencia de la USP subraya que "al igual que antes sucediera con Euskadiko Ezkerra (EE), la realización de este debate podría dar lugar a que fuera Herri Batasuna la que presionara sobre ETA, a fin de conseguir el abandono de la lucha armada". En este sentido, destaca el contenido de un Zutik (En Pie, boletín de ETA) de 1976 en el que ETA asume que "la lucha armada no es la única actividad revolucionaria".
La USP destaca, asimismo, en su ponencia que "a ETA, en la actualidad, no se le puede negar cierta competencia entre amplios sectores de la población vasca, lo cual, evidentemente, otorga un cierto grado de legitimidad a su discurso". A este respecto, indica que "esta competencia le ha facilitado la posibilidad de sobrevivir y de extenderse en el tiempo, adoptando diversos roles".