Cargos electos y dirigentes del PNV tratan de impedir la dimisión de Garaikoetxea

Cargos electos y dirigentes del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y ex consejeros del Gobierno vasco presionaron durante toda la jornada de ayer a Carlos Garaikoetxea para que no dimita como presidente del Ejecutivo. El temor de aquéllos a que el actual lehendakiri adopte esa decisión, en respuesta al pronunciamiento de la asamblea del PNV -reunida el sábado pasado-, manifiestamente contrario a la postura del Gobierno vasco sobre la ley de Territorios Históricos, que regula la distribución del poder y los recursos económicos entre el Gobierno autónomo y las diputaciones no se había disipado ano...

Cargos electos y dirigentes del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y ex consejeros del Gobierno vasco presionaron durante toda la jornada de ayer a Carlos Garaikoetxea para que no dimita como presidente del Ejecutivo. El temor de aquéllos a que el actual lehendakiri adopte esa decisión, en respuesta al pronunciamiento de la asamblea del PNV -reunida el sábado pasado-, manifiestamente contrario a la postura del Gobierno vasco sobre la ley de Territorios Históricos, que regula la distribución del poder y los recursos económicos entre el Gobierno autónomo y las diputaciones no se había disipado anoche. Máxime después de que el propio Garaikoetxea les comunicara que iba a tomar una decisión "dura para mí y para vosotros" en la reunión que celebra hoy el Gobierno vasco.

Carlos Garaikoetxea estuvo reunido desde primeras horas de la mañana de ayer con los miembros de su Gabinete para estudiar la situación creada por la resolución de la asamblea, que él mismo calificó como "difícil" y "crítica", negó a hacer declaraciones a los medios informativos. Los consejeros del Gobierno no ocultaban su nerviosismo por la decisión que el lendakari pueda adoptar en las próximas horas.La mayoría de ellos, acaso con la excepción del vicepresidente de su Gobierno, Mario Fernández, consideran que Garaikoetxea no tiene otro remedio que dimitir si la permanencia en su puesto implica el sometimiento a la aplicación de la resolución adoptada el sábado por la asamblea del PNV sobre la ley de Territorios Históricos, que reparte las competencias entre las diputaciones y el Ejecutivo autónomo y es radicalmente contraria a la del Gobierno vasco.

Fuentes próximas al Gobierno de Vitoria no descartaban, no obstante, que Carlos Garaikoetxea haya esgrimido una vez más su dimisión para provocar una nueva campaña de apoyo popular a su permanencia en el puesto de presidente -como ya hiciera en diciembre de 1983- y echar un último pulso al consejo nacional del partido, máximo órgano de dirección del PNV.

Los miembros de este consejo estaban reunidos anoche en la Diputación de Vizcaya con los presidentes de las tres diputaciones forales y con Xabier Arzallus. La presencia del ex presidente del partido, sin cargos de responsabilidad en el mismo, llamó poderosamente la atención, máxime cuando ha insistido públicamente en "que está retirado de la política".

Página 11