Tribuna:

El primer violín comenzó a tocar en clave de sol

El comienzo de esta semana, recortada por la fiesta de la Hispanidad, ha causado muy buena impresión entre los analistas, quienes consideran que el eco favorable del anuncio de la inminente firma del pacto social caló, aunque con retraso, entre los operadores. Pero, al fin, toda la orquesta aprendió a tocar con la misma clave.También ha influido positivamente el saber concretamente el futuro tratamiento fiscal de las inversiones. Aunque el 17% de desgravación para las suscripciones en renta variable es algo menos de lo esperado (el 20%), se considera que el Gobierno ha querido dejar bien paten...

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El comienzo de esta semana, recortada por la fiesta de la Hispanidad, ha causado muy buena impresión entre los analistas, quienes consideran que el eco favorable del anuncio de la inminente firma del pacto social caló, aunque con retraso, entre los operadores. Pero, al fin, toda la orquesta aprendió a tocar con la misma clave.También ha influido positivamente el saber concretamente el futuro tratamiento fiscal de las inversiones. Aunque el 17% de desgravación para las suscripciones en renta variable es algo menos de lo esperado (el 20%), se considera que el Gobierno ha querido dejar bien patente el trato de favor hacia la inversión-riesgo. A fin de cuentas, el mercado ya había descontado estas buenas noticias, ya que el equipo gubernamental se ha basado durante estas últimas semanas en señalar el comportamiento bursátil como un exponente de las virtudes de su política económica. El papel de escaparate propagandístico de la Bolsa permanece contra viento y marea.

Recuperar la primera página de los diarios, volver a ser objeto de editoriales o la publicación de una serie de artículos de divulgación con cosas que están sirviendo para que muchos ahorradores individuales se acerquen a este mercado, con el consiguiente aumento de los volúmenes de contratación. A nadie extraña ya que el negocio se sitúe en 2.868 millones de pesetas efectivas en una jornada, como ocurrió el viernes, una cifra insospechada hace pocos meses.

Sin embargo, esta contratación, en la sesión de ayer, volvió a ceñirse casi exclusivamente en el corro eléctrico, que después de un leve respiro en las dos jornadas precedentes ha vuelto a caminar con paso firme. Casi todas las compras a crédito se posicionan en este sector: en el pasado viernes, FECSA recolectó 143,7 millones de pesetas; Hidrola obtuvo 67,6; Unión-Fenosa, 62,4; Iberduero, 35,7, e Hidro Cantábrico, 30,3 millones.

Es muy significativo, a este respecto, que Hidro Cataluña no haya conseguido más que fijar posición dinero, precisamente en unos momentos en que las órdenes de compra han entrado a saco en este corro. No son pocos los expertos que consideran que ésta es una prueba contundente del fuerte interés que originan estos valores: si unos están caros, hay que buscar otros a mejor precio. Y aquí se congestionan las órdenes compradoras al no encontrar suficiente contrapartida de papel.

Los bancos, por su parte, han perdido gran parte de su fuerte impulso, aunque el saldo por caja continúa siendo muy elevado, sobre todo a causa de la demanda registrada en Santander (361.244 títulos a la compra). Aparte de esta entidad, el resto ha vuelto a situarse en niveles discretos, por lo que no es de extrañar que las repeticiones sean cada vez más frecuentes.

En el resto de los sectores, el dinero anda retraído, y solamente algunos valores muy seleccionados consiguen atraer la atención de los operadores.

Los expertos consideran que el perfil de esta tanda semanal será claramente alcista, aunque no debe pasar mucho tiempo sin que el mercado se tome un respiro ante el esfuerzo que va a suponer la ampliación de Telefónica, casi ahora mismo, y las futuras operaciones eléctricas.

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