La quiebra de la 'banquera del pueblo' parece confirmada

Esperada por unos, temida por otros, la quiebra de María Branca Dos Santos, la banquera del pueblo portuguesa, parece haberse consumado durante el pasado fin de semana.

Dos centenares de prestamistas que se concentraron en la mañana de ayer frente a la única oficina de la organización aún abierta en Lisboa encontraron la puerta cerrada con Luna reja metálica, y los vecinos confirmaron que "colaboradores" de doña Branca retiraron durante la noche anterior todo el material y los documentos que se encontraban en el local, alquilado hace unos meses.

También ha desaparecido...

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Esperada por unos, temida por otros, la quiebra de María Branca Dos Santos, la banquera del pueblo portuguesa, parece haberse consumado durante el pasado fin de semana.

Dos centenares de prestamistas que se concentraron en la mañana de ayer frente a la única oficina de la organización aún abierta en Lisboa encontraron la puerta cerrada con Luna reja metálica, y los vecinos confirmaron que "colaboradores" de doña Branca retiraron durante la noche anterior todo el material y los documentos que se encontraban en el local, alquilado hace unos meses.

También ha desaparecido de la luna del escaparate el cartel que desde el pasado 17 de septiembre informaba de los días y horas de pagos de intereses y anunciaba para mediados de octubre el inicio de las operaciones de reembolso.

La policía, que interrogó a Branca Dos Santos el pasado viernes, sabía de antemano que la organización clandestina había abandonado el local de la avenida de Río de Janeiro en Lisboa. Las, barreras metálicas que protegían el acceso al banco han desaparecido y dos números de la Policía de, Seguridad Pública se limitan a observar, al otro lado de la callejas decenas de personas que en pequeños grupos aún esperan contra: toda evidencia que alguien les informe del. destino del dinero que entregaron a doña Branca.

Alegando el secreto judicial, la policía portuguesa no informó de los resultados de los interrogatorios a que fueron sometidos en los últimos días Branca Dos Santos, su colaborador Ernesto Cordeiro y la esposa de éste, Gisela Simao de Abreu. Los dos últimos fueron, el pasado jueves, protagonistas de un supuesto secuestro, que las autoridades portuguesas creen simulado. Según un testigo, Branca Dos Santos había declarado que ya no le importa "morir o ser presa".

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