La entrada de España y Portugal en la CEE demora los acuerdos con Yugoslavia

Hasta que España y Portugal no ingresen en la Comunidad Económica Europea (CEE), Yugoslavia no recibirá una respuesta detallada sobre el tipo de acuerdo comercial que podrá renovar en 1985 con el Mercado Común, según han dejado claro representantes de la Comunidad que asisten a la reunión que se celebra junto al lago de Ohrid.Los días 18 y 19 de junio se discutirá en Luxemburgo, ya a nivel ministerial, el proyecto de nuevo acuerdo yugoslavo-comunitario, incluido el peliagudo tema de los 400.000 yugoslavos que trabajan en la Europa de los diez. Se sabe que el orden del día contiene nueva...

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Hasta que España y Portugal no ingresen en la Comunidad Económica Europea (CEE), Yugoslavia no recibirá una respuesta detallada sobre el tipo de acuerdo comercial que podrá renovar en 1985 con el Mercado Común, según han dejado claro representantes de la Comunidad que asisten a la reunión que se celebra junto al lago de Ohrid.Los días 18 y 19 de junio se discutirá en Luxemburgo, ya a nivel ministerial, el proyecto de nuevo acuerdo yugoslavo-comunitario, incluido el peliagudo tema de los 400.000 yugoslavos que trabajan en la Europa de los diez. Se sabe que el orden del día contiene nuevas formas de cooperación en la industria alimentaria.

La vertiente económica del no alineamiento yugoslavo permite a este país gozar de un acuerdo definido como sui géneris, "que tiene en cuenta la pertenencia de Yugoslavia a la Europa mediterránea", según se reafirmaba en Ohrid el 1 de junio. Es de notar que los no alineados yugoslavos, que cooperan estrechamente con el mercado común del Este (CAME), sustituyen siempre el término político de Europa occidental por el geográfico de Europa mediterránea.

Pero el ingreso de los dos países ibéricos en la Comunidad Económica Europea "alterará la estructura integracionista de ésta" y, con ello, las posibilidades de Yugoslavia para colocar sus productos. Los vinos de Kosovo gozan de buena acogida en Alemania Occidental, pero Yugoslavia es deficitaria en aceite de oliva y cítricos, aunque sea a plazo medio una gran potencia agrícola.

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