Estallan 11 bombas, la mayoría en oficinas de Hacienda, en diversas ciudades españolas

Un total de 11 bombas explotaron ayer en diversas oficinas de Hacienda de Madrid, Barcelona, Zaragoza y Sevilla, así como en oficinas de la Diputación Provincial de Valencia y en dos localidades del País Vasco, causando daños materiales de diversa consideración. En Euskadi estallaron dos cargas en un bar de Lequeitio, y una tercera, compuesta por 700 gramos de Goma 2, en las oficinas que la empresa Citroën tiene en la localidad guipuzcoana de Andoáin.En llamada a la Policía Municipal de Sevilla, un comunicante anónimo, que dijo pertenecer a los GRAPO (Grupos Revolucionarios Antifascistas Prime...

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Un total de 11 bombas explotaron ayer en diversas oficinas de Hacienda de Madrid, Barcelona, Zaragoza y Sevilla, así como en oficinas de la Diputación Provincial de Valencia y en dos localidades del País Vasco, causando daños materiales de diversa consideración. En Euskadi estallaron dos cargas en un bar de Lequeitio, y una tercera, compuesta por 700 gramos de Goma 2, en las oficinas que la empresa Citroën tiene en la localidad guipuzcoana de Andoáin.En llamada a la Policía Municipal de Sevilla, un comunicante anónimo, que dijo pertenecer a los GRAPO (Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre), se responsabilizó de la colocación de dos bombas, una de las cuales no explotó, en dos oficinas de recaudación de impuestos. Aunque una de las explosiones de Valencia fue reivindicada por el grupo Terra Lliure, fuentes oficiales consideran probable que la mayor parte de los explosivos ha sido colocada por los GRAPO, dada la similitud de las cargas colocadas.

Por otra parte, la organización terrorista ETA Militar, en llamada telefónica a la redacción en Pamplona del diario Egin, se ha responsabilizado del atentado perpetrado el pasado domingo en la capital navarra que costó la vida al capitán de la Guardia Civil Luis Ollo Ochoa y causó heridas de gravedad a su esposa, Blanca Esther Pérez Aramendía. Ésta permanece internada en la residencia Virgen del Camino, de Pamplona, y evoluciona favorablemente de sus heridas.

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