González y Pujol quieren salvar el diálogo político, a pesar de Banca Catalana

Dos días después de que el fiscal general del Estado, Luis Antonio Burón Barba, presentase la querella contra Jordi Pujol y 24 ex directivos de Banca Catalana por presuntas falsedades en documento mercantil y apropiación indebida de bienes, los presidentes del Gobierno y de la Generalitat, Felipe González y Jordi Pujol, respectivamente, manifestaron ayer su deseo, en sendas declaraciones a Radio Nacional, de que el asunto de Banca Catalana no interfiera en las relaciones políticas entre Madrid y Cataluña. "No seré yo el que mezcle una cosa y otra", dijo González, mientras que horas después Puj...

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Dos días después de que el fiscal general del Estado, Luis Antonio Burón Barba, presentase la querella contra Jordi Pujol y 24 ex directivos de Banca Catalana por presuntas falsedades en documento mercantil y apropiación indebida de bienes, los presidentes del Gobierno y de la Generalitat, Felipe González y Jordi Pujol, respectivamente, manifestaron ayer su deseo, en sendas declaraciones a Radio Nacional, de que el asunto de Banca Catalana no interfiera en las relaciones políticas entre Madrid y Cataluña. "No seré yo el que mezcle una cosa y otra", dijo González, mientras que horas después Pujol indicaba que por encima de todo hay que salvar las instituciones y anunciaba que a mediados de junio visitaría al presidente del Gobierno, dentro del clima de buenas relaciones institucionales que deben existir entre el Gobierno y la Generalitat.

González afirmaba también que "cualquier persona que trate de mezclar negocios financieros con un asunto político, allá esa persona con su responsabilidad. En absoluto me parece algo razonable: incluso me llegaría a parecer deleznable que se tratara de implicar una y otra cosa. Mi disposición a seguir dialogando con el presidente de la Generalitat es plena". Jordi Pujol le contestaba a última hora de la tarde con otras declaraciones, en las que, al margen de expresar sus diferencias profundas en el análisis de lo ocurrido en Banca Catalana -"hay que dar los datos verdaderos de la cuestión"-, anunciaba que viajaría a Madrid a mediados de junio para visitar al presidente González. "El presidente González y yo", dijo Pujol, "tenemos una obligación que nos une, y es que, tenemos que responder a aquello que es nuestro deber y nuestra obligación primera; él es presidente del Gobierno y yo presidente de la Generalitat. Somos dos figuras institucionales y tenemos que salvar esto por encima de todo".Felipe González hacía ayer unas declaraciones, a primeras horas de la mañana, en las que instaba a los diferentes grupos parlamentarios a que pidieran al Gobierno un debate en el Congreso, explicativo de los hechos que han derivado en la presentacíón de la querella sobre Banca Catalana. Dicho debate no debería "entrar ni entrometerse en las funciones de la justicia". Poco después se conocía la reacción de los partidos políticos: ninguno de ellos expresó ni la más mínima intención de secundar la invitación del presidente González, mostrándose profundamente incómodos, con la propuesta. Páginas 43 a 45

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