Cartas al director

La misión del museo

La publicación en EL PAIS de unas declaraciones del señor director del Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid, con ocasión de las últimas adquisiciones de este centro, nos obliga moral y profesionalmente, a los abajo firmantes, a expresar nuestra opinión al respecto.No podemos sino manifestar nuestra perplejidad ante las afirmaciones vertidas por el señor director del MEAC. Entre ellas, la de que "la misión del museo es sólo la de comprar y exhibir", o la de que ésta sea "la única manera de que la gente venga y se interese por el museo".

Pobre, trasnochado y agónico debe ser, a l...

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La publicación en EL PAIS de unas declaraciones del señor director del Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid, con ocasión de las últimas adquisiciones de este centro, nos obliga moral y profesionalmente, a los abajo firmantes, a expresar nuestra opinión al respecto.No podemos sino manifestar nuestra perplejidad ante las afirmaciones vertidas por el señor director del MEAC. Entre ellas, la de que "la misión del museo es sólo la de comprar y exhibir", o la de que ésta sea "la única manera de que la gente venga y se interese por el museo".

Pobre, trasnochado y agónico debe ser, a la vista de estas declaraciones, el concepto que el señor Martínez-Novillo tiene de lo que deba ser un museo, en concreto un museo de arte contemporáneo. De este modo, podemos explicarnos, sin apenas esfuerzo, la disfunción, el casi nulo poder de convocatoria y las oscuras perspectivas que continúan cerniéndose sobre esta -en teoría- primera institución museística de arte actual de nuestro país. ( ... )

Mal está no propiciar las actividades culturales en un museo de arte contemporáneo. Peor, no creer en su necesidad de convertirse en centro impulsor y difusor del arte y la cultura. Pero intentar defender públicamente estos desatinos trasciende cualquier calificación de desautorización profesional. Y nos produce especial y colectivo rubor.

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Suponemos que el señor Martínez-Novillo conoce al menos la definición que del museo mantiene la Unesco a través del ICOM. Que tiene noticias de las más probadas orientaciones museológicas actuales. Y que estará informado de los intentos de ruptura formal y de superación de la crisis de identidad y de funciones que muchos centros de arte contemporáneo han venido realizando desde hace más de dos décadas en diversos países del mundo. ( ... )

Por ello mismo, nos extraña que realice esas declaraciones. Y por ello precisamente manifestamos nuestro desacuerdo y solicitamos de las autoridades competentes el remedio eficaz contra estos planteamientos decimonónicos, y la alternativa real al reto que un museo de arte contemporáneo -pluridisciplinar y abierto, científico y pedagógico...- tiene encarado en sintonía con nuestras necesidades culturales y con la especial evolución artística de nuestro mundo, tecnológica y visualmente avanzado. /

Conservador de museos de arte contemporáneo, profesor de Museología y vicedecano de la facultad de Bellas Artes de Madrid, y la firma de 72 profesores, catedráticos y artistas, todos ellos licenciados en Bellas Artes y alumnos del curso monográfico de doctorado.

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