Tribuna:

Ha continuado la orientación alcista de los mercados

Unos resultados genéricos más que halagüeños han presentado los mercados de acciones en la pasada semana. La práctica totalidad de los sectores en que se dividen convencionalmente las bolsas españolas reflejaron apreciaciones significativas, mientras los valores eléctricos continuaron siendo los abanderados de un mercado alcista cuya potencia sorprende incluso a los especialistas, y donde los recortes que se generan, por razones estrictamente técnicas, al materializar parte de las fuertes plusvalías acumuladas, son rápidamente superados, en parte, por la reciente demanda que se está generando ...

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Unos resultados genéricos más que halagüeños han presentado los mercados de acciones en la pasada semana. La práctica totalidad de los sectores en que se dividen convencionalmente las bolsas españolas reflejaron apreciaciones significativas, mientras los valores eléctricos continuaron siendo los abanderados de un mercado alcista cuya potencia sorprende incluso a los especialistas, y donde los recortes que se generan, por razones estrictamente técnicas, al materializar parte de las fuertes plusvalías acumuladas, son rápidamente superados, en parte, por la reciente demanda que se está generando desde las, propias sociedades de cartera, entre cuyos responsables ha comenzado a cundir un cierto temor a verse absolutamente descolgados de este episodio positivo del mercado.Los niveles de liquidez entre los inversores institucionales continúan siendo bastante elevados y, lo que es más importante, presentan un signo creciente a medida que se va produciendo la amortización de activos monetarios tomados a altos tipos de interés que no pueden ser sustituidos por otros de rendimientos similares. Las posibilidades, del mercado resultan, por tanto, favorables a un mantenimiento de las alzas a corto plazo. Al menos esta opinión es compartida por casi todos los medios especializados, que manifiestan corno, principales puntos de preocupación la actitud que puedan mantener los inversores extranjeros ante las plusvalías acumuladas y la respuesta que pueda dar el mercado a la resucitada polémica entre la Administración y, las empresas del sector eléctrico en torno a la situación financiera de estas compañías.

No obstante, parece que lo único que se podría hacer es afinar los criterios de selección de estos títulos, al menos entre las grandes empresas. La posibilidad de que se recomienden recortes selectivos de dividendos, como paso previo a la revisión de tarifas, pertenece prácticamente al mundo de las realidades. En cualquier caso, estos recortes ni afectarán a todas las compañías -alguna puede incluso recuperar una parte de lo que había recortado anteriormente- ni su cuantía será igual.

Por su parte, los valores bancarios no quisieron perderse esta fiesta bursátil y con más voluntad que medios aportados por el mercado consiguieron apuntarse discretas mejoras en la primera mitad del ciclo, para después, en las reuniones de cierre, acelerar el proceso a fondo amparándose en unos saldos de compra que habían sufrido un importante empuje gracias a algunas órdenes de inversores extranjeros y a la celebración propia, en la que se embarcaba el Vizcaya, tras el anuncio de que ejercía su derecho preferente de compra del paquete mayoritario de acciones de Banca Catalana.

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