El Gobierno, preocupado por el fuerte aumento del tráfico y consumo de heroína en España

El consumo de heroína está alcanzando en España cifras alarmantes y se puede convertir en un problema de difícil solución, equiparable en magnitud al que genera el terrorismo y el desempleo. La situación está siendo contemplada con preocupación por el Gobierno, que ha visto como en 1983, en comparación con el año anterior, se ha duplicado el número de muertos por sobredosis de droga. Según datos oficiales, en 1982 fallecieron 48 drogadictos; al año siguiente se produjeron 93 fallecimientos, y en lo que va de 1984, unos 10 aproximadamente.

En un reciente programa radiofónico realizado en...

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El consumo de heroína está alcanzando en España cifras alarmantes y se puede convertir en un problema de difícil solución, equiparable en magnitud al que genera el terrorismo y el desempleo. La situación está siendo contemplada con preocupación por el Gobierno, que ha visto como en 1983, en comparación con el año anterior, se ha duplicado el número de muertos por sobredosis de droga. Según datos oficiales, en 1982 fallecieron 48 drogadictos; al año siguiente se produjeron 93 fallecimientos, y en lo que va de 1984, unos 10 aproximadamente.

En un reciente programa radiofónico realizado en horas del mediodía por la Cadena SER fue tratado el tema de la heroína y se produjo tan alto número de llamadas, principalmente de familiares de drogadictos, que se bloqueó la centralita de la emisora. Algunos de estos familiares, en su mayoría parientes directos, llegaron incluso, dado su estado de ánimo, a facilitar datos sobre locales, al menos en Madrid, donde se expendía la droga.El problema, sin embargo, es mucho más complejo, ya que en España están funcionando mafias organizadas que se encargan de la recogida, manipulación, distribución y venta de la droga. La heroína llega a España en un alto grado de pureza, aunque posteriormente es adulterada por los traficantes, que tratan con ello de sacarle todo el provecho posible para su beneficio económico. Estas adulteraciones son las que, en la mayoría de los casos, provocan la muerte del consumidor de la droga.

Aunque no existe una estadística fiable de la entrada de droga en España, las incautaciones de la policía en materia de drogas sobrepasan ligeramente el 10% de lo que se consume en el país. En 1983 los servicios policiales de estupefacientes intervinieron aproximadamente 109 kilos de heroína, 275 de cocaína y 20.000 de hachís. Las cifras son superiores a las del año anterior, en el que se produjeron las siguientes incautaciones: 67 kilos de heroína, 13 de cocaína y 18.192 de hachís.

El Campo de Gibraltar

El fenómeno del consumo de droga es muy dispar entre las diferentes regiones españolas. Sólo en la provincia de Cádiz existen unos 10.000 heroinómanos. Es precisamente en la zona del Campo de Gibraltar (Algeciras-La Línea de la Concepción) donde se producen las principales operaciones de venta y tráfico.La heroína llega principalmente de Holanda y se introduce hasta el sur de España, ya que en esta zona, dada su proximidad con Marruecos, es abundante el tráfico de hachís, droga blanda de gran consumo en Europa. En el Campo de Gibraltar se producen con frecuencia grandes operaciones de intercambio de heroína por hachís.

Los servicios policiales de estupefacientes dependen de la Comisaría General de Policía Judicial. Los componen una Brigada Central de Estupefacientes y 13 grupos regionales, con seis hombres cada uno. La Brigada Central de Estupefacientes cuenta asimismo con seis grupos antidroga. Por su parte, la Guardia Civil cuenta con 50 grupos antidrogas, tantos como provincias, así como un grupo especial.

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