Contínua la huelga en la fábrica automovilística de Talbot en Poissy, a pesar del acuerdo

Un centenar de huelguistas ocuparon en la mañana de ayer la factoría de automóviles que el grupo PSA (Peugeot-Talbot-Citroën) tiene en Poissy, en las cercanías de París. La ocupación se produjo a pesar del acuerdo conseguido entre el Gobierno francés -que intermedió en el conflicto- y la dirección de la compañía, autorizando el despido de 1.905 trabajadores en lugar de los 2.905 que en un principio preveía el plan de reestructuración de la empresa. En la factoría de Poissy, dedicada a la fabricación de modelos Talbot, trabajan 17.000 personas, de las que un 55% son trabajadores inmigrados.
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Un centenar de huelguistas ocuparon en la mañana de ayer la factoría de automóviles que el grupo PSA (Peugeot-Talbot-Citroën) tiene en Poissy, en las cercanías de París. La ocupación se produjo a pesar del acuerdo conseguido entre el Gobierno francés -que intermedió en el conflicto- y la dirección de la compañía, autorizando el despido de 1.905 trabajadores en lugar de los 2.905 que en un principio preveía el plan de reestructuración de la empresa. En la factoría de Poissy, dedicada a la fabricación de modelos Talbot, trabajan 17.000 personas, de las que un 55% son trabajadores inmigrados.

El acuerdo fue anunciado anteayer por el primer ministro francés, Pierre Mauroy, que intervino en el conflicto tras la decisión de la empresa de proceder al cierre de la fábrica. El propio presidente Mitterrand había exigido la adopción de medidas urgentes ante el anuncio de la dirección de la compañía.El acuerdo parecía contar en principio con la aceptación de las dos organizaciones sindicales -CGT (Confederación General del Trabajo, próxima al partido comunista) y CFDT (Confederación Francesa Democrática del Trabajo, socialista autogestionaria)- que animan la huelga convocada contra los despidos. El domingo por la tarde, en el momento en que la dirección del grupo PSA anunciaba que mantenía su decisión de cerrar la fábrica como consecuencia de un paro técnico hasta el próximo 2 de enero, los dos sindicatos habían decidido una reconducción de la huelga para conseguir el inicio de negociaciones sobre las modalidades de aplicación del plan social que acompañaba a las medidas de despido.

Este plan prevé compensaciones financieras y programas de formación para permitir la reclasificación de los trabajadores afectados.

En la mañana de ayer, la CFDT endureció su posición al decidir oponerse a todo despido, mientras que la CGT convocaba una asamblea para discutir las soluciones a adoptar.

Una semana de huelga

La huelga se inició hace poco más de una semana, tras el ultimátum de la dirección del grupo Peugeot-Talbot-Citroën lanzado al Gobierno, una vez fracasadas las negociaciones en las que intervino el ministro de Asuntos Sociales, Pierre Beregovoy. El plan, que había sido remitido a la Administración el pasado verano, contemplaba la reducción de 8.000 empleos en el grupo (2.905 en la citada factoría).Talbot, que agrupa a las antiguas filiales europeas de Chrysler, fue adquirida en 1978 por el grupo PSA y bajo esa denominación se fabrican anualmente 200.000 automóviles en Francia, 120.000 en el Reino Unido y unos 50.000 en Espada.

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