Westinghouse suspende pagos
El motivo de esta carta es manifestar nuestra indignación por la medida de Westinghouse ¿española? de suspender pagos.Aducir que la empresa se verá muy afectada por el llamado parón nuclear decretado por el Gobierno tiene como único fin aprovechar la situación de histeria colectiva generada por el sector eléctrico y los nucleócratas que los respaldan para desmantelar una compañía que ha obtenido pingües beneficios con procedimientos nada claros. Hay que recordar que suyos son los reactores de Zorita, Almaraz I y II y Ascó I y II. Resumiendo, Westinghouse ha copado el mercado nucl...
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El motivo de esta carta es manifestar nuestra indignación por la medida de Westinghouse ¿española? de suspender pagos.Aducir que la empresa se verá muy afectada por el llamado parón nuclear decretado por el Gobierno tiene como único fin aprovechar la situación de histeria colectiva generada por el sector eléctrico y los nucleócratas que los respaldan para desmantelar una compañía que ha obtenido pingües beneficios con procedimientos nada claros. Hay que recordar que suyos son los reactores de Zorita, Almaraz I y II y Ascó I y II. Resumiendo, Westinghouse ha copado el mercado nuclear español.
Igualmente falso es argumentar que el mercado exterior de Westinghouse se vería fuertemente afectado por la no autorización de Vandellós II, que es central de referencia de otros proyectos. Desgraciadamente, ésta es una de las centrales que cuentan con el beneplácito del Gobierno para cubrir los 7.500 megavatios previstos. Es gracioso comprobar que una de las razones del Ministerio de Industria para autorizarla es la alta participación de las empresas españolas. En ellas incluía a Westinghouse española, en la que los dos tercios de accionistas americanos han tomado la decisión de suspender pagos aun en contra de sus hasta ahora fieles lacayos: el presidente y el abogado de la empresa.
En cuanto a Lemóniz, no hay nadie interesado en su conclusión. Ni siquiera Iberduero -compañía propietaria de la central-, aquejada de graves problemas financieros y satisfecha por las medidas compensatorias del comité de intervención, que incluyen ayudas fiscales y la posibilidad de suplir los kilovatios producidos durante 5.000 horaslaño por Lemóniz con otras fuentes de energía.
No queremos concluir esta carta sin ofrecer nuestra ayuda y nuestra solidaridad a los trabajadores, como siempre, víctimas inocentes en este tipo de medidas. Para los ecologistas resulta especialmente doloroso comprobar cómo en ocasiones los trabajadores de la industria nuclear han sido instrumentalizados en nuestra contra. La energía nuclear sólo es necesaria en la lógica del beneficio y la explotación. ¡Ellos son los responsables! /
En representación de Asociación de Estudios y Protección de la Naturaleza (AEPDEN).