Delincuencia en la plaza de Letamendi de Barcelona
En la confluencia de las calles barcelonesas de Enrique Granados y Aragón, concretamente en la plaza de Letamendi, hay una zona ajardinada (por cierto, la única en todo el área) donde normalmente acudimos los niños y personas mayores de la vecindad en busca de ese siempre más dificil solaz. Digo difícil porque a pesar de los cada día más altos índices de contaminación, tanto de ruidos como de gases, hemos de padecer desde hace ya unos años la concentración (totalmente descarada) de una abundante delincuencia, principalmente drogadictos.En diversas ocasiones hemos puesto en conocimiento de la P...
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En la confluencia de las calles barcelonesas de Enrique Granados y Aragón, concretamente en la plaza de Letamendi, hay una zona ajardinada (por cierto, la única en todo el área) donde normalmente acudimos los niños y personas mayores de la vecindad en busca de ese siempre más dificil solaz. Digo difícil porque a pesar de los cada día más altos índices de contaminación, tanto de ruidos como de gases, hemos de padecer desde hace ya unos años la concentración (totalmente descarada) de una abundante delincuencia, principalmente drogadictos.En diversas ocasiones hemos puesto en conocimiento de la Policía Municipal estas peligrosas irregularidades, teniendo como respuesta la indiferencia.
Ante esta falta de interés y pasividad nos preguntamos: ¿hemos de recurrir a la ley del Talión para rimpiar este importante foco de contagio social? /